miércoles, 30 de junio de 2010

'Destierro' en El Arenal

Hace un par de semanas hablábamos de las imágenes que van a vivir las vacaciones de verano en el taller de algún imaginero (puede volver a leerlo aquí) y hoy vamos a hacerlo sobre áquellas que las van a pasar fuera pero por obras en su sede canónica. En este sentido, destaca la presencia de los titulares de La Exaltación en San Román, donde se encuentran 'empadronados' desde hace años, cuando Santa Catalina fue cerrada al culto por su pésimo estado de conservación. De igual modo, y sin ir más lejos, el lunes hacíamos mención al traslado de El Cachorro a su primitiva capilla. Ayer, en El Arenal, se vivió el último 'destierro' hasta la fecha, el de los titulares de El Baratillo.

Y es que la junta de gobierno de la corporación del Miércoles Santo aprobó hace poco más de una semana que se realizasen diversos trabajos de mejora en la capilla, lo que obligó a que tanto el conjunto de la Virgen de la Piedad y el Señor de la Misericordia como la Virgen de la Caridad tuviesen que 'emigrar'. Por ello, y  partir de hoy, sus devotos tendrán que ir al Salón de la Santa Cruz, a la espalda del templo baratillero y en las dependencias de la casa hermandad, para verlas y asistir a los cultos, a la espera de que las obras finalicen dentro de unos meses. Hasta entonces, los albañiles se afanarán en adecentar la recoleta iglesia, restaurando, entre otros elementos, la solería, los paramentos, las humedades, las yeserías, la cimentación y las instalaciones electricas.

Así, este templo vivirá en un continuo ir y venir de ladrillos y cemento, como ocurre también en San Vicente, San Ignacio de Loyola (ambas sin haber tenido que despedirse de sus titulares, como puedes leer aquí), la capilla del Patrocinio y Santa Catalina. Todo para que, a la vuelta de unos meses, una de las capillas más singulares de nuestra ciudad vuelva a brillar con luz propia, prácticamente como si fuera nueva. Porque en Sevilla, si las cofradías no miran por la conservación de su patrimonio, a ver quién lo haría.

martes, 29 de junio de 2010

Y volvió a llorar San Pedro

Es una de las citas que nos marca a los cofrades que el verano ya se encuentra entre nosotros, uno de esos momentos singulares que, aún sin pasos en la calle, reafirman la simbiosis que existe entre Sevilla y todo aquello que recuerde a la Semana Santa. Porque anoche, cuando el reloj marcó la 'hora bruja', la Giralda volvió a sonar a cornetas y tambores, los de una banda de El Sol que volvió a interpretar, por vigesimoctavo año consecutivo, las Lagrimas de San Pedro.

Se trata de una partitura, que volvió a sonar hoy a primera hora de la mañana y al mediodía, que rinde homenaje al primer Papa del cristinanismo con motivo de su onomástica y que cuenta con más de 600 años de historia. No en vano, se interpretó por primera vez en 1403, cuando el infante Don Fernando regresó a la capital hispalense tras la conquista de Antequera. Entonces, la ciudad celebró su llegada con grandes luminarias y repiques de campanas, al modo de lo que acontecía durante la festividad de San Pedro. A partir de ahí, cada año se conmemoró la efeméride, hasta que en 1629 el Cabildo de la Catedral prohibió cualquier acto de esta índole salvo en la festividad del Apostol.

Así, desde ese momento, hasta 1839, la Giralda recibe cada 29 de junio entre fuegos artificiales y compases de clarín. Más tarde, la tradición vivió un paréntesis que duró hasta 1865, en la que resucitó para volver a quedar dormida en 1961. Sin embargo, en 1983, Antonio Burgos y Rogelio Gómez removieron Roma con Santiago para poder recuperar la magia de una noche tan especial. Así, pidieron al Cabildo que la banda del Sol pudiese interpretar Las Lágrimas de San Pedro desde la torre que fue alminar de la vieja mezquita hispalense. La respuesta fue afirmativa y, desde entonces, sus cornetas no faltan a su cita de cada verano.

De este modo, anoche, el Apostol volvió a llorar varias veces. Una, mirando hacia el Alcázar; otra, en dirección al Aljarafe; otra, con la vista puesta en la plaza de San Francisco, y, una última, hacia la plaza Virgen de los Reyes. Todas salidas de los clarines de seis músicos ataviados con un uniforme que recuerda al que llevaba en las grandes ocasiones el Regimiento de Caballería SaguntoVII, pero que no tienen más munición en las alforjas que unas notas musicales que después de más de 600 años mantienen viva una tradición que, de otra forma, sólo habría pasado a ser pasto del recuerdo.

lunes, 28 de junio de 2010

Presente, pasado y futuro

Anoche, El Cachorro volvió a dormir en la capilla que le recibió a su llegada a Triana allá en el siglo XVII. Lo hizo saliendo brevemente a la calle, abandonando el altar mayor de la ampliación finalizada en 1960 para situarse en el de la primitiva iglesia de la corporación, en la que permanecerá hasta finales de septiembre. Entonces, será el momento en el que el Cristo de la Expiración regrese al punto en el que durante todo el año recibe a quienes se acercan a rezarle, quedando enmarcado en un monumental retablo hecho en marmol, bronce y madera.

Se hará así realidad uno de los proyectos más importantes de la cofradía trianera en los últimos años y con el que los devotos del Señor de Triana quieren agasajarlo con camarín a la altura de lo que se merece, en el que más allá de la magnificencia que se desprenderá de su visión, contará con las últimas medidas de seguridad y contraincendios. Todo, basándose en la idea de Jacinto Pérez y el diseño de Francisco Javier Sánchez de los Reyes, conceptos que después han llevado a la práctica el tallista Pedro Manuel Benítez y han dorado los Hermanos González.

Será la culminación de la nueva capilla del Patrocinio, ésa que se edificó hace 50 años justo a la vera de aquella en la que surgió la hermandad en 1689 y que hoy hace las veces de Sacramental dentro del mismo templo. Y es que la cofradía de El Cachorro puede presumir de lo que muy pocas pueden hacerlo: de haber residido siempre en el mismo sitio, al final de la calle Castilla. Desde allí, el Cristo de la Expiración ha observado el devenir de los siglos, primero en la iglesia primitiva, más tarde, presidiendo la ampliación y, ahora, volviendo a los orígenes esperando que se terminen las obras de su retablo.

Pocas veces el paso del tiempo puede verse más claro en una cofradía que aquí, donde el presente, el pasado y el futuro se dan la mano sin salir del mismo templo. Porque, si las paredes hablaran, cuántas cosas podrían contar las de la capilla del Patrocinio... y cuántas le quedarán por contar. Y todo sin que el Rey de Triana tenga que salir de su propia casa, algo que sólo hace cada Viernes Santo, cuando, como siempre, Sevilla volverá a postrarse a sus plantas.

domingo, 27 de junio de 2010

El paso que no debió salir

Ayer, tras el descanso del pasado fin de semana, Sevilla volvió a ver pasear un paso por sus calles. Fue en la barriada de la Hermandad del Trabajo, donde el Señor de la Clemencia se reencontró con sus vecinos tras dos años de espera. De este modo, y tras el paréntesis de 2009, el barrio vivió de nuevo su día grande en torno a un Cristo arrodillado que avanzó a los sones de las marchas que salían de las cornetas y los tambores de la banda del Amor de San Juan de Aznalfarache. Y es que en el último sábado de junio volvieron a escucharse y saborearse los ecos de la Semana Santa.

Pero, curiosamente, esta salida, que podría ser para muchos la de otra 'ilegal' más, ha venido acompañada de polémica, sobre todo porque no ha estado respaldada por su junta de gobierno. En este sentido, el propio presidente de ésta, Fernando de Andrés, difundió durante los días previos en diversos medios cofrades un comunicado en el que recalcaba que la intención del cuerpo directivo que encabeza era el de "sustituir las salidas procesionales por una estrecha colaboración con las parroquias de la zona, sobre todo en lo relacionado con sus labores sociales". Sin embargo, según afirmó el escrito, un miembro de la junta, "al que se le pidió encarecidamente su dimisión" llevó adelante, con ayuda de un grupo de chavales, la salida de este año, amparado en que "es el dueño de los bienes de la corporación". Como respuesta a ello, el resto del cuerpo de gobierno, en pleno, presentó su dimisión irrevocable, dejando a la cofradía sumida en un vacío de poder, aunque habiendo realizado su salida anual.

Sin duda, esta situación da la razón a muchos que ven en estas nuevas 'embriones de hermandades' más ganas de 'jugar a los pasitos' que de hacer religión e iglesia, ya que, no en vano, con su actuación han dejado claro que les importa más procesionar que cualquier otra cosa. Además, lo curioso de este caso es que el empecinamiento de uno ha hecho que se haga justo lo contrario de lo que quería la junta de gobierno, algo que no tiene el menor sentido. Por ello, más allá de lo que pudiese lucirse ayer por las calles el Señor de la Clemencia, sus hermanos, aquellos que deben de velar por sus intereses y los del prójimo, habrán firmado el ridículo más espantoso de toda su historia, con una salida carente de significado, ya que a una cofradía no le da sentido un paso, sino todo lo que hay detrás, aquello que se va forjando y sucediendo a lo largo del resto del año.

Aquí, por lo que se ve, no hay nada más allá que un grupo de personas encandiladas por los panes de oro de las canastillas, los sones de tambores y cornetas, el aroma a incienso y el humo de las velas que se consumen en los candelabros. Sólo un grupo de 'capillitas' (aunque, quizás, esto haya que ponerlo en cuarentena, sobre todo por la nula vida de hermandad que se desprende del comunicado) que quiere 'jugar a los pasitos', haciendo un flaco favor a todas aquellas nuevas corporaciones que tienen que sobreponerse a las críticas de los rancios que creen que no hay sitio para más. Sí lo hay, pero siempre que no sigan el ejemplo de lo sucedido en la Hermandad del Trabajo, puesto que, de hacerlo, sólo serían una procesión más que nunca debió salir.

sábado, 26 de junio de 2010

Parecidos razonables

Las comparaciones son odiosas, pero, en ocasiones, también inevitables. Sobre todo cuando dos obras se parecen tantísimo como las dos últimas que ha aportado la pintora Isabel Sola al mundo de las cofradías de Sevilla. Pero, empecemos por el final, el cartel anunciador de la Coronación Canónica de la Virgen de Regla de la hermandad de Los Panaderos. En él aparece un primer plano de la titular mariana de la corporación de la calle Orfila, en cuya mano derecha sostiene una espiga de trigo que se convierte en la Giralda, que aparece tras Ella. Además, Ésta tiene el nombre de la ciudad, Sevilla, difuminado entre los pliegues de su pecherín. De igual modo, la corona que porta la talla se funde con el tono azulado del cielo de la ciudad, un color que gana mayor consistencia en los laterales de la imagen para servir de premarco para ésta y contener el motivo de la obra (arriba), la fecha en la que tendrá lugar (en el lateral izquierdo) y el nombre de la talla (abajo).

Con todo ello, la autora ha creado una composición cargada de simbolismo. El más claro y vinculado a la propia hermandad es el de la espiga de trigo de la que sale la Giralda, que, a su vez, sirve de metáfora de la Catedral, el lugar donde se celebrará el acto. En la misma línea, la fusión entre el Cielo y la corona ejemplifica el reconocimiento eclesiástico que supone la Coronación Canónica. Mientras, la aparición de la palabra Sevilla en el pecho de la imagen evoca el cariño que la ciudad regalará a la Virgen de Regla durante su procesión de regreso a San Andrés.

Pero, a pesar de ello, no se puede hablar de una obra absolutamente original. Es cierto que usa motivos que no tendrían demasiado sentido en otras, pero recuerda, 'sospechosamente', a otro cartel que anunciaba una reciente salida extraordinaria, la de la Virgen de la Esperanza de Triana con motivo del XXV Aniversaio de su Coronación Canónica. Éste, realizado también por Isabel Sola, tenía a la Virgen ubicada en la misma posición y con motivos de la ciudad, en este caso de Triana, ubicados a su derecha. Sí difieren los motivos simbólicos, vinculados al carácter marinero de la corporación de la calle Pureza (la Virgen como rosa de los vientos o un caballo de mar como el cinco) y el punto en el que aparece la leyenda (sólo abajo en este caso).

Quizás esto haya podido ocurrir porque la propia hermandad de Los Panaderos pidieran que su cartel se inspirara en el trianero o simple casualidad, pero lo cierto es que salta a la vista que ambos no sólo coinciden en quien los hizo, sino en mucho más. Ojalá en este caso, los paralelismos entre ambas salidas extraordinarias se queden ahí y la del próximo 26 de septiembre quede marcada por la mesura, sin convertirse en una auténtica maratón de un palio por las calles.

viernes, 25 de junio de 2010

Se acabó la pesadilla

Tras cinco días de tensión y casi 107 horas de espera, la normalidad regresa a la basílica del Gran Poder. Hoy, por fin, han desaparecido los miedos, las miradas a un altar ocupado por una cruz que nunca debió de bajarse del hombro derecho de quien la porta, la intranquilidad sobre el estado del Señor de Sevilla... porque esta mañana, desde primera hora, el Hijo de Dios ya está en su casa. Se encuentra a la misma altura de sus fieles, presto a recibirlos y a devolverles el cariño que le han demostrado desde que estalló la tormenta y durante el tiempo en el que estuvo 'hospitalizado' al cuidado de Álvarez Duarte.

Hoy, la ciudad se viste de vísperas de Jueves Santo, volviendo a postrarse a sus plantas, dispuesta a besar las manos del Mejor de los Nacidos, dejando claro que no está hecha de "madera muerta", sino de la suma de los sentimientos de sus fieles, ésos que no han dejado de sentir un aire frío en los pulmones desde que supieron que alguien, en pleno siglo XXI, quiso emular a un centurión romano y volver a maltratar a Jesús en su propia casa. Pero eso, ya es parte del pasado y ha pasado a un segundo plano, porque hoy de lo único que se habla en la vieja Híspalis es de que el mayor de sus tesoros está de nuevo en su cofre, presto y dispuesto a seguir cuidando de tantos y tantos sevillanos que pasarán ante sus ojos en busca de ayuda y con la devoción y la oración como única moneda de cambio.

En pleno Junio Eucarístico, San Lorenzo se ha convertido en el mejor escenario posible de la religiosidad de la ciudad en un día grande que, hace menos de una semana, no había ni proyecto de que apareciese en rojo en el calendario. Porque la ciudad sonríe hoy de oreja a oreja, como lo hace Juan de Mesa, que desde que comenzó a tener la compañía de la policía en la plaza se asió más fuerte al trozo de madera que tiene a su lado y en el que se intuye la cara del Hijo de Dios. La misma que brilla más que nunca con la expresión sumisa y sufrida de siempre. Es la magia del Señor de Sevilla, que con su sola presencia es capaz de acabar con cualquier miedo y que en este 25 de junio de 2010 pondrá fin a la pesadilla más dura que han tenido que soportar los cofrades hispalenses en muchísimo tiempo.

jueves, 24 de junio de 2010

El Corpus de Los Humeros

La agresión sufrida por el Gran Poder el pasado domingo ha eclipsado por completo el resto de noticias cofrades. De hecho, para muchos, no habrá tenido lugar ninguna otra en los últimos días. Sin embargo, sí que ha habido novedades, algunas, incluso, de cara al año 2011. Así, ya conocemos en qué fachada van a estar inspiradas las portadas de la próxima edición del Corpus. Y es que, según anunció la pasada semana Fiestas Mayores, éstas reproducirán la de la capilla de Los Humeros, situada en la calle Torneo.

La decisión se tomó por unanimidad y para conmemorar el 250 aniversario de la bendición del templo, así como también de las tallas de la Virgen del Rosario y el Señor de la Paz, titulares de la hermandad que allí radica. Por ello, el Corpus de 2011 entrará y saldrá de la plaza de San Francisco tras atravesar una copia del pórtico de esta capilla, edificada a finales del siglo XVIII y que se ajusta de manera plena a la última etapa del barroco sevillano.

Curiosamente, aún no se sabe si las portadas reproducirán el elemento más característico de su fachada (amén de la reproducción en barro de su titular): la inclinación hacia atrás de su campanario, que lleva así desde 1901. En este sentido, habrá que esperar casi un año para saber si es así y ver con nuestros propios ojos los pórticos más originales de cuanto se recuerdan para celebrar el Día del Señor, una fecha que Sevilla, como siempre, vivirá de forma especial, pero que lo será mucho más en Los Terceros (donde, como puedes leer aquí, se espera una respuesta de los canónigos catedralicios para una posible incorporación del misterio de La Cena al cortejo) y en Los Humeros.

miércoles, 23 de junio de 2010

La otra mejilla

Decía Jesucristo en la Biblia que cuando uno recibe un ataque del prójimo lo que debe hacer, a modo de respuesta, es poner la otra mejilla. Éso mismo parece haber entendido el Juzgado de Sevilla en relación al agresor del Gran Poder, al que dejó en libertad con cargos en la mañana de ayer. En este sentido, tras oir su declaración, los fiscales, que le imputaban un delito contra el patrimonio, concluyeron que el acusado no se encuentra en plenitud de sus facultades mentales, por lo que dictó su traslado a la Unidad de Agudos de psiquiatría de un centro hospitalario de la ciudad a fin de que se le estudie y poder decidir sobre su internamiento.

Pero, por si había alguna duda sobre el estado de Luis C.O., que así se llama el individuo, todas quedaron despejadas al oír su respuesta a los periodistas, quienes a la salida del Juzgado le cuestionaron sobre por qué haía agredido al Señor de Sevilla. "Porque soy Jesucristo, a ver si os enterais; que eso sólo lo puede hacer Jesucristo", manifestó a voz en grito, dejando claro su convencimiento de que está por el bien y el mal y que no actuó por ideales políticos, como muchos llegaron a decir cuando saltó la noticia.

Así pues, hablamos, a falta de confirmación oficial, de un demente, alguien que no piensa ni siente como una persona normal, sino según le dicta una conciencia trastocada por motivos que, de momento, escapan a nuestro conocimiento. Es, por tanto, más allá de un conato de verdugo del Gran Poder, una víctima de la desgracia, digna de lástima. Sin embargo, es curioso que muchos devotos del Señor, de ésos que llevan por bandera su condición de cristiano y las ideas que defiende la religión digan que merece estar en la cárcel de manera preventiva, que debería ser condenado sin contemplaciones y que con decisiones como la tomada por el Juzgado se confirma que todo está podrido.

Qué paradójico. Aquellos que dicen ser seguidores de alguien que proclamaba que había que "amar al prójimo como a uno mismo", le desean lo peor a quien no es responsable de sus actos. Puede que sea porque desapareció de sus memorias la idea de poner la otra mejilla o que, simplemente, la sustituyeron por la ley del talión y las ansias de venganza. Pero, ¿pensará lo mismo su víctima, ésa que dio su vida para salvarnos a todos y abrirnos las puertas del paraíso? Que lástima que con el paso del tiempo se vayan diluyendo las enseñanzas del Maestro a quien decimos seguir y tomen fuerza otras que van por el camino contrario.

martes, 22 de junio de 2010

A la espera de dejar atrás el susto

Una semana. Ése parece que será el tiempo que deberemos esperar para que se nos pase del todo el susto del pasado domingo en San Lorenzo. Al menos, éso es lo que ha afirmado Luis Álvarez Duarte, que desde ayer está acometiendo la restauración del Gran Poder tras la agresión sufrida en su propio altar por parte de un demente. El imaginero se ha hecho cargo de los trabajos en lugar de los hermanos Cruz Solís, que decidieron delegar en él tras confirmarse que los daños en la talla no eran importantes.

En este sentido, el autor sevillano señaló que el Señor de Sevilla "está siendo atendido en su propia 'casa'" y que, si no surge ningún tipo de problema, "la restauración estará finiquitada en unos cuatro o cinco días". Así, si todo va bien, el Gran Poder podría volver a presidir el altar mayor de su basílica a final de semana, acabando con esa sensación de zozobra que acompaña a los sevillanos que estos días miran hacia su sitio de siempre y sólo ven la cruz que le acompaña cada día sobre su hombro derecho.

Seguro que Ella también se siente huérfana sin su presencia y espera 'como agua de mayo' descansar de nuevo sobre su dueño. Y es que, hasta que dentro de unos días no esté cada cosa en su lugar, Sevilla no volverá a respirar tranquila y continuará con ese escalofrío en el cuerpo que se instaló entre nosotros el domingo hacia las 21.00 horas y que queremos que desaparezca cuanto antes. Por ello, ojalá se cumplan a rajatabla los plazos y todo se quede en un susto que nunca debió producirse, pero que, al menos, quedará pronto atrás en nuestro recuerdo.

lunes, 21 de junio de 2010

Pánico y estupor en San Lorenzo

Sin duda, no hay mejor definición de lo que pudo vivirse ayer en San Lorenzo, cuando un hombre, al parecer bajo los efectos de una crisis mental, atacó violentamente a la imagen del Gran Poder. Fue hacia las 21.00 horas, poco después de finalizar la misa, cuando el individuo, alto y de unos 30 años, subió las escaleras del camarín, puso el pie en la peana y se situó junto a la talla, emprendiéndola a golpes con ella. Como producto de ello, y tras un fuerte tirón, le arrancó el brazo derecho y parte de la túnica. En ese momento, dos policías de paisano que se encontraban en la basílica procedieron a reducirlo y detenerlo.

El propio hermano mayor de la corporación, Enrique Esquivias, confirmó que los daños sufridos por el Señor de Sevilla "son reparables" y que la imagen será examinada por los hermanos Cruz Solís para proceder a su posterior restauración. Del mismo modo, señaló que la Policía Nacional ha abierto una investigación al respecto, para la que también se han prestado a colaborar el Consejo de Hermandades y Cofradías, la Delegación del Gobierno en la ciudad y la de la Junta de Andalucía.

Los primeros resultados de la misma, basados en las declaraciones del propio detenido, han concluido que se trata de un ataque perpetrado por un enfermo mental en estado de crisis, ya que, no en vano, éste afirmó ser el Hijo de Dios cuando se le preguntó por la causa del ataque. En cualquier caso, las partes implicadas en las pesquisas han señalado que éstas continuarán durante los próximos días.

Con todo, el Señor del Gran Poder volvió a revivir las sensaciones de aquella Madrugá de 1919, cuando una bomba anarquista quiso acabar con Él a la salida de la Catedral. Esta vez ha sido sin armas de por medio y en su propia casa, pero, afortunadamente, sin que haya que lamentar males mayores que unos daños que pueden subsanarse con una visita a un taller de imaginería. Sin embargo, igual que entonces, se trata de un acto deleznable, condenable a pesar de que su autor parezca no estar en plenitud de sus facultades mentales y que, sobre todo, vuelve a poner en tela de juicio la seguridad de nuestros titulares, a los que sí se les blinda cuando se cierran las puertas de los templos, pero no cuando éstas permanecen abiertas.

domingo, 20 de junio de 2010

Y al octavo descansó

Hoy termina un fin de semana diferente. Y es que, tras siete consecutivos en los que entre Glorias, Cruces de Mayo, 'ilegales' y procesiones eucarística no hemos parado de ver pasos por las calles, en éste nos hemos quedado huérfanos de ellos. Así, durante estos días, el único incienso que ha olido la ciudad es el de algún puesto ambulante. Del mismo modo, las únicas marchas que han sonado salieron de los ensayos de las pocas bandas que aún no han cerrado el curso o de los radios de los coches de muchos 'capillitas' que no conciben la vida con otra banda sonora. Pero, más allá de eso, la capital hispalense ha estado vacía de ambiente cofrade.

Sin embargo, la provincia sí ha puesto fin a la semana entre parihuelas, bullas, cornetas y tambores. Así, Guillena se rindió ayer ante el Señor de la Vera+Cruz y la Virgen de los Dolores, que procesionaron de manera extraordinaria con motivo del 450 aniversario de la fundación de la corporación. Por su parte, Valencina de la Concepción vivió un día histórico para la Virgen de la Estrella, que fue coronada canónicamente, mientras que Dos Hermanas volvió a reencontrarse con San Juan Evangelista. Hoy será el turno de La Rinconada, donde el Señor Resucitado realizará un Via Lucis público, y, sobre todo, de Castilblanco de los Arroyos, que vivirá el regreso de su patrón, San Benito Abad.

Y es que, este fin de semana, el protagonismo cofrade no lo ha tenido ni el centro ni los barrios, sino la provincia, ésa que no ha querido tomarse ya las vacaciones de verano y sigue viviendo sus dias de fiesta entre pasos. Mientras, la capital retoma fuerzas para lo que queda aún por ver, para las Vírgenes del Carmen, las del Rosario, la de Todos los Santos, la Divina Enfermera, la extraordinaria de La Macarena, la del Rosario de Montesión, la del Señor de la Paz de Rochelambert, del de la Salud de San Pablo, la coronación canónica de la Virgen de Regla de los Panaderos.... con todo esto por delante, que menos que Sevilla se haya tomado este fin de semana como descanso.

sábado, 19 de junio de 2010

De vacaciones en el taller

Quedan casi 300 días para un nuevo Domingo de Ramos y las hermandades ya se encuentran inmersas en preparativos. De hecho, muchas aprovechan estos meses para restaurar a sus titulares. Así, en Jesús Despojado continúan esperando que la Virgen de los Dolores y Misericordia regrese a la capilla de Molviedro una vez que finalicen los trabajos que sobre ella está realizando Pedro Manzano (puedes leer más sobre ello aquí).

En principio, su retorno está previsto para septiembre y hasta entonces compartirá 'casa' con otra Virgen sevillana que desfila por las calles de la ciudad en Semana Santa, la de la Luz en el misterio de las Tres Necesidades de La Carretería. Y es que la imagen de la corporación del Arenal fue trasladada la pasada semana al taller del imaginero trianero y allí se le sustituirá su actual candelero por uno nuevo. Según las primeras estimaciones, la talla podrá estar de vuelta a sus capilla para el inicio de los cultos de regla, que comenzarán justo a la vuelta de las vacaciones de verano.

Pero no serán estas dos las únicas imágenes marianas de la ciudad que pasarán los meses estivales en un taller. De hecho, en las Glorias también habrá una restauración, la de la Reina de Todos los Santos, que en las próximas semanas visitará el taller de Juan Manuel Miñarro para que éste modifique y sanee las zonas de anclaje de la talla, así como de las estructuras de sujeción de la ráfaga y la imagen del Niño Jesús. En este sentido, se prevé que los trabajos finalizarán en la segunda quincena de septiembre, por lo que la Virgen podría estar en Omnium Sanctorum para presidir los cultos preparativos de su próxima salida procesional a primeros de noviembre.

A ésto, habría que unir los trabajos que el IAPH está realizando sobre el paso del Gran Poder (puedes volver a leer sobre ello aquí) o la restauración a la que también se está sometiendo desde esta semana al del Señor de la Oración en el Huerto de Montesión. Y es que, mientras muchos cofrades cuentan los días para marcharse de vacaciones a la playa, parte del patrimonio artístico de nuestras hermandades comienzan a vivir las suyas propias en talleres de imaginería. Es su particular forma de 'recargar las pilas' para que, a la vuelta de verano, puedan lucir mejor que nunca en sus respectivos altares y casas de hermandad. Porque si a nosotros, que no llegamos al siglo de vida nos resulta más que necesario descansar y retomar fuerzas, cuanto más lo será para tallas como éstas que llevan siglos a sus espaldas.

viernes, 18 de junio de 2010

La hora de las goteras

Sin duda, la gran protagonista de la pasada Cuaresma fue la lluvia. Ya estaba aquí cuando llegó el Miércoles de Ceniza y se quedó con nosotros casi hasta las Vísperas, haciendo que los días previos a la Semana Santa giraran en torno a partes y previsiones meteorológicas que mirábamos con las carnes abiertas. Finalmente, sólo llovío el Lunes Santo, pero los efectos del líquido elemento ya se habían hecho notar en nuestras hermandades, que no sólo vieron como muchos de sus cultos externos tuvieron que ser suspendidos, sino que, en algunos casos, tuvieron problemas en sus templos.

Fue el caso de la hermandad de San Pablo y la de Las Penas de San Vicente. La primera tuvo que suspender sus cultos por goteras en San Ignacio de Loyola e, incluso, sopesó seriamente realizar su salida procesional desde otra iglesia, cosa que finalmente se desestimó. Ahora, coincidiendo con la aparición del calor, la corporación ha propuesto una subida de la cuota anual, a fin de que así se financien las obras que se tienen que llevar a cabo para el saneamiento del templo, que se iniciarían en el menor plazo posible.

Algo parecido sucede en San Vicente, donde la Virgen de los Dolores tuvo que cambiar su ubicación durante la Cuaresma por filtraciones en su capilla. En este sentido, hace unos días comenzaron los trabajos de arreglo de la techumbre, por lo que tanto la talla de la Virgen como la del Señor de las Penas se encuentran ubicadas en el altar mayor de la parroquia, lugar en el que continuarán hasta que dentro de un mes puedan regresar a su 'habitación'.

Ambas hermandades sufren todavía en sus carnes los últimos efectos del invierno más lluvioso que recordamos, en el que el Cielo no dejó de llorar desde antes de Navidad hasta que las calles no comenzaron a oler a incienso y azahar. Ahora, cuando el sol campa a sus anchas en el firmamento, es el momento de hacer un último esfuerzo para recuperarse de las consecuencias de un líquido elemento que nunca se derrama al gusto de todos y que puso en peligro el patrimonio artístico, religioso e, incluso, humano de estas dos corporaciones hispalenses. Todo para que en unos meses tanto San Ignacio de Loyola como San Vicente estén preparadas para el regreso de los chubascos con total normalidad, esperando que las goteras a las que en estos días les ha llegado su hora no vuelvan a acudir a misa como hicieron este año a partir de febrero.

jueves, 17 de junio de 2010

Los renglones torcidos de la historia

Se sabía que la decisión de los hermanos de La Esperanza de Triana de no dejar participar al Señor de las Tres Caídas en el Vía Crucis del año que viene en Madrid iba a traer cola. Lo que no imaginábamos es que iba a provocar que Monseñor Asenjo atacara de manera deliberada contra ella, acusando de "falta de eclesialidad" a quienes votaron que 'No' en el cabildo extraordinario del pasado viernes, fecha que, según sus palabras "no será recordada como la más brillante de la historia de la cofradía".

Curiosamente, y a pesar de tales afirmaciones, el arzobispo dijo hablar "sin acritud ni resentimiento" y manifestó en varias ocasiones que lamentaba que Sevilla no vaya a estar representada en este acto que, como recordó, se efectuará "con motivo de una visita del Papa". Y, sin duda, en esto último no mentía, sobre todo porque sus declaraciones se ajustan a la típica pataleta de un niño en el recreo cuando le cuelan un gol por toda la escuadra. Sí, porque ante la visita de Benedicto XVI, Monseñor Asenjo ha sido el único prelado de las diocesis más importantes de España que ha sido incapaz de convencer a una hermandad para que participe en el Vía Crucis del próximo verano y eso, mal que le pese, le ha escocido y mucho.

Sobre todo porque sabe que quedará mal ante el Papa y el presidente de la Conferencia Episcopal, Rouco Varela,  ya que los hermanos de La Esperanza de Triana no han entrado en el juego de un espectáculo de magnificencia y suntuosidad innecesario y que, con la que está cayendo, tendría un elevadísimo coste para, simplemente, "dar testimonio de fe". En este sentido, y ya que hablamos de falta de eclesialidad, ¿no defendía la Iglesia que Dios se encuentra en todo lugar?, ¿es, por tanto, necesario movilizar a quince pasos y miles de personas a la capital de España para pasear unos minutos por la calle para evangelizar? ¿qué pasa con la figura del Papa o las Escrituras? ¿no sirven también para ello?

Pero, claro, si Rouco Varela no le presenta el catálogo de enseres y obras de arte que tenemos en España para rememorar la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo no gana puntos ante Benedicto XVI y, por qué no decirlo, como hipotético sucesor suyo. Que curioso es que se hable de falta de religiosidad cuando una hermandad ha optado por no ir a jugar a los pasitos a Madrid. Pero claro, Málaga, Valladolid, Jerez y otras diócesis sí van a tener representación y Sevilla no, y eso escuece.

Es cierto que las hermandades, como dijo el propio Asenjo, "son parte de la Iglesia", pero en contra de lo que el piensa "no pierden su sentido lejos de ésta", es más, aquí en Sevilla son las que dan sentido a la Iglesia, con su presencia pública y labor social, dando testimonio de fe más allá de su salida procesional en Semana Santa, ayudando a quienes más lo necesitan. ¿Acaso conoce lo que hace cada cofradía por sus vecinos más pobres, por sus barrios? ¿No es un acto mayor de caridad cristiana el de apoyar a niños con problemas, como hace La Esperanza de Triana todo el año, que el de pasearse por Madrid a la vista del Papa?

No lo niegue señor arzobispo, lo que le molesta es que una cofradía de Sevilla haya sido capaz de ser mucho más madura que la curia, de saber dónde está su sitio y actuar en consecuencia. Dice que no quiere ser un "cacique", pero habla con la rabia de uno al que le ha salido el tiro por la culata. ¿Le daría igual que se perdiesen fondos para la ayuda social de la hermandad con tal de participar en el Vía Crucis? ¿Acaso no está siempre el Señor de las Tres Caídas en su capilla para que el Papa o quien quiera venga a verlo cuando desee? ¿Qué mayor  muestra de fervor religioso puede dar Triana que durante una Madrugá de Viernes Santo? ¿Por qué no invita al Santo Padre a venir entonces?

Definitivamente, no se ha enterado de dónde ha aterrizado usted, de que las cosas no funcionan en Sevilla como lo pueden hacer en Castilla o de Despeñaperros para arriba. Si antes muchos pensaban que, tras la impecable labor de Amigo Vallejo, el cargo le venía grande, ahora, ni le cuento. Desengañese, las cofradías no atienden al "ordena y mando" al que acostumbra la Iglesia, sino que, gracias a Dios, son mucho más democráticas y modernas que ésta. Váyase acostumbrando, porque aquí la religión no se basa en las beatas de comunión diaria, ni se queda en los púlpitos y templos, sino que se vive en las casas de hermandad y no pertenece a los sacerdotes, sino al propio pueblo. Y no se preocupe, que con sus declaraciones, tampoco ha escrito usted, de momento, ninguna página brillante en la historia.

miércoles, 16 de junio de 2010

Donde dije digo, digo Diego

Dicen que rectificar es de sabios, pero también es verdad que, en muchas ocasiones, cuando uno quiere darle la vuelta a lo que ha dicho con anterioridad lo que hace es intentar que el resto quede por tonto. Hay veces que sale bien y nadie se da cuenta, pero otras veces salta a la vista el error y no hay manera de que cuele. Dentro de esta última dinámica podrían insertarse dos noticias cofrades que han visto la luz en las últimas 24 horas y que suponen importantes incoherencias con manifestaciones anteriores de representantes de las propias hermandades.

Empezamos por San Pablo, donde dos meses y medio después todavía sigue coleando el chaparrón que le cayó el pasado Lunes Santo y que le hizo refugiarse en El Salvador porque, según la versión oficial, no cabía en San Benito. Curiosamente, justo al finalizar la Semana Santa, el hermano mayor de la corporación, Manuel Márquez, afirmó en Punto Radio que, realmente, sí que podían haber entrado los pasos, pero que se decidió ir a la colegial para "no molestar" a la cofradía de La Calzá, que, incluso, le había ofrecido su templo (puedes leerlo aquí).

Bien, pues ahora, la web de la corporación del Polígono publica un par de informes en los que, aparte de confirmar que los pasos no sufrieron ningún daño por el agua, se vuelve a decir que éstos no cabían por la puerta de San Benito. En este sentido, indican que el problema está no en la anchura, sino en la altura del pórtico y que la diferencia estribaría en unos diez centímetros. A este respecto, cabría preguntarse ¿se ha sopesado la opción de haber echado los cuerpos a tierra para entrar? Si el propio hermano mayor admitió que sí cabían, ¿a qué viene este informe ahora? Y tras comprobar que contradicen declaraciones anteriores, ¿quién miente?

Pero la cosa no acaba ahí, porque en La Trinidad se acaba de convocar un cabildo extraordinario para el próximo domingo y en el que se decidirá si se da potestad a la junta de gobierno para vender el actual paso de misterio del Señor de las Cinco Llagas, que será sustituido el próximo año por uno que se está elaborando en el taller de los hermanos Caballero. Se trataría, pues, de una nueva fuente de ingresos para financiarlo. Hasta ahí, perfecto. El problema es que la propia cúpula directiva de la cofradía señaló que se estaba haciendo la nueva parihuela porque la actual "no aguantaría ni un Sábado Santo más, ya que su estado de conservación era pésimo" ¿En qué quedamos? ¿Está bien o mal? ¿Se quiere hacer dinero a costa de estafar a otras hermandades o, realmente, se puede vender el paso sin problema?

Desde luego, es obvio que las cofradías están gobernadas por humanos y que es lógico que, como todos, puedan errar en sus comentarios y afirmaciones. Pero tampoco es menos cierto que, por el cargo que ocupan y la cantidad de gente a la que representan, deberían medir mucho mejos qué dicen y sus repercusiones. Sobre todo en casos como éstos en los que tirando un poco de hemeroteca se les puede rebatir y sacar los colores muy facilmente. Y es que, como la mujer del César, los hermanos mayores deberían tener en cuenta que de ellos se esperan no sólo que sean diligentes en su tarea, sino que además, en la medida de lo posible, lo parezcan en todo momento.

martes, 15 de junio de 2010

La crisis llega a las cofradías

Los problemas económicos no respetan ni a Dios. De hecho, este año nos hemos quedado sin poder ver en la calle el palio de la agrupación parroquial de Pasión y Muerte porque la escasez de recursos de ésta ha ralentizado sus trabajos de ejecución. Ahora, una corporación del Domingo de Ramos, La Hiniesta, es la que se encuentra en una situación parecida y ha convocado a sus hermanos para un cabildo extraordinario el próximo jueves en el que se propondrá el pago de una cuota extraordinaria.

El motivo es que las obras de la nueva casa hermandad, inaugurada el 31 de enero del presente año, se han dejado sentir, y de que manera, en las arcas de San Julián. De hecho, desde hace varios años, sus miembros están abonando una cuota extraordinaria por este motivo, aunque con ello no se están paliando las dificultades monetarias de la cofradía. Así, desde hace meses la corporación ha decidido recortar drásticamente los gastos, tomando decisiones como la de que el Corpus de la parroquia saliese sin pasos (puedes leerlo aquí) o que la Virgen de la Hiniesta Gloriosa hiciese su camino de ida a la plaza de San Francisco sin música.

Ahora, como medida de urgencia, la junta que preside Francisco Granado ha optado por proponer a sus hermanos una nueva cuota extraordinaria que permita que la hermandad pueda continuar su día a día sin ningún tipo de problema. Y es que la crisis se ceba con todos, incluso con instituciones, como las cofradías, que, además de su carácter religioso, cumplen una importantísima labor social. Ojalá el 'temporal' pase pronto y con medidas como ésta se puedan capear bien sus efectos. Aún así, esta situación servirá de toque de atención para otras corporaciones que, a buen seguro, optarán por 'poner sus barbas a remojar' viendo lo que está sucediendo en San Julián, donde, esperemos, todo se quede en un simple susto.