El pasado viernes, se activaron todas las alarmas en relación al Vía Crucis Magno del próximo 17-F. No en vano, la Subdelegación del Gobierno anuló todos los recorridos previstos (recuérdalo aquí), toda vez que no podía garantizar la seguridad de los cortejos habida cuenta de que está convocada una huelga por parte del Sindicato de Policía para dicha jornada. Incluso, se llegó a hablar de que esta medida sentó muy mal en San Lorenzo, ya que, según algunos, el Gran Poder veía que con ella se esfumaba todo el trato de favor que, presuntamente, el Consejo le había prometido.
El caso es que esa misma tarde se llevó a cabo una reunión de urgencia en la que, a grandes rasgos, se solucionó casi todo. De hecho, se llegó al acuerdo de que todos los misterios llegarían a sus sitios desde la Plaza Nueva y en el orden inverso a las estaciones, es decir, empezando por la última y terminando con la primera. De este modo, se arreglaba uno de los principales obstáculos que veía la Subdelegación, que no veía apropiado que se accediera a las inmediaciones de la Catedral por tres vías distintas. Así, las que vengan de Triana (Cachorro, Penas de La Estrella y Soberano Poder de San Gonzalo) y Conversión de Montserrat subirán por Méndez Núñez o Zaragoza, nunca por el Arenal.
Por lo demás, todo sigue igual, a excepción de que el primer paso deberá estar en su sitio a las 15.34 horas, no a las 15.30, y el último a las 17.18, no a las 16.30. Este último aspecto se dejará notar en el tiempo en el que estarán a disposición del público los pasos expuestos, que pasará a ser de 1.30 horas a apenas 42 minutos. En cualquier caso, es muy probable que tengamos más noticias en estas tres semanas, puesto que todavía quedan aspectos que pulir en relación a un acto que está dando, entre unas cosas y otras, más quebraderos de cabeza de los inicialmente esperados.
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