El Corpus más eucarístico

Hoy nos despedimos de mayo y nos metemos de lleno en la semana del Corpus, que tendrá su momento más álgido el próximo jueves con la salida de la procesión de la Custodia desde la Catedral. Antes, con los últimos rayos de la luna bañando las calles de la ciudad, el Señor de la Cena llegará al Palacio Arzobispal para presidir su altar, un hecho que, quizás, el año que viene no vuelva a repetirse, sobre todo porque existen serias posibilidades de que el titular de la corporación de Los Terceros pueda formar parte en 2011 del cortejo del Santísimo.

Y es que dentro de doce meses se conmemorarán 500 años del surgimiento de las hermandades sacramentales hispalenses y, por ello, la cofradía de la calle Sol se ha ofrecido a integrar su misterio en la procesión del Corpus representándolas. En este sentido, aún no ha trascendido si los canónigos catedralicios han tomado alguna decisión al respecto, aunque lo cierto es que desde hace años se atisban problemas de masificación en esta procesión que podrían atajarse con la introducción de nuevos pasos. Así, si el año pasado se estrenó el de Santa Ángela, la salida puntual del primer paso de La Cena podría hacer que la procesión fuese algo menos tediosa que actualmente.

En cualquier caso, la corporación tiene decidido que ya sea saliendo desde dentro o desde fuera, en el altar de siempre, en 2011 veremos en la calle al misterio al completo, por lo que en los próximos meses se dilucidará si por segunda vez en la historia, (tras el precedente de 1919 con este mismo paso), imágenes pasionistas acompañando al Santísimo en 'el tercer jueves del año que reluce más que el sol'. De ser finalmente así, dentro de doce meses viviremos el Corpus más eucarístico de la historia, en el que se darán la mano el simbolismo de la Custodia con la iconografía del paso que representa la instauración de este sacramento en la Semana Santa de Sevilla. Habrá, por tanto, que estar atento a las novedades que se produzcan en torno a este tema. Y es que aún no hemos vivido el día del Señor en este año y ya miramos, con ansia, al del que viene. Así es esta ciudad, pensando siempre en lo que está por venir sin perder de vista el presente.

¡Ay San Fernando!

Parece mentira. Hoy se celebra el día del patrón de Sevilla, San Fernando, y con la inmensa cantidad de procesiones que se realizan en esta ciudad no haya una exclusiva para conmemorar la onomástica del mismo. Es cierto que el próximo jueves saldrá en el Corpus, como también lo harán otros santos patronos hispalenses como Santa Justa y Rufina o San Isidoro y San Leandro, pero resulta harto curioso que no lo vaya a hacer en las próximas horas y como protagonista principal, máxime cuando fue él quien hizo que desde la Giralda repicasen las campanas y no las llamadas a la oración de un imán.

Durante los últimos años, sí que salió en su día desde la Catedral y acompañado por la Virgen de las Aguas de El Salvador, pero en esta ocasión no será así. Según reza la versión oficial, no procesionará "porque su festividad coincide con la de la Santísima Trinidad y se quiere evitar así saturar la jornada". O sea, que este fin de semana tenemos pasos casi por cualquier esquina y al 'pobre' de nuestro patrón lo 'castigan' dejándolo en casa. Se ve que no tiene suficiente con que su día lo haya perdido en favor de uno de Feria o con que ésos aficionados que festejaban sus éxitos a su lado lo hayan dejado sólo porque no hagan más que llorar, mientras que se escuchen los ecos de los 'eternos rivales' por el otro lado, en la plaza de San Francisco.

Total, que salvo por el pregón y la exposición de la urna en la que se guarda su cuerpo incorrupto, el 30 de mayo podría pasar por el calendario sin pena ni gloria. ¡Cuánta diferencia con la Virgen de los Reyes! Seguro que él tenía asumido que nadie iba a venir desde la playa o el resto de la provincia exclusivamente a verlo, pero sí que contaría con que los que estaban aquí se pasaran a echar un ratito a su lado. Pero ni eso. Y mientras bullas y pasos en cada esquina. Unos tanto y otros tan poco. Y pensar que fuiste rey y conquistador de la ciudad. ¡Ay, quién te ha visto y quién te ve, San Fernando!

El sprint final de mayo

Entre pasos y sin darnos cuenta, así se nos está yendo el mes de mayo. De hecho, hoy comenzamos a vivir su último fin de semana, que, como todos los anteriores, estará marcado por salidas procesionales. En total, serán trece las que se produzcan a lo largo de la tarde de hoy, en la que tendremos en la calle a las penúltimas Cruces de Mayo. Así, veremos a las de La Candelaria, Padre Pío-Palmete, La O, Las Aguas y El Baratillo.

Además, Juan XXIII se llenará de Glorias con la Virgen de la Anunciación, mientras que el Polígono Sur y La Trinidad lo harán con los aires salesianos de María Auxiliadora y San Juan Bosco. En Alcosa, la Virgen de los Desamparados volverá a reencontrarse un año más con sus vecinos y en Triana se hará un hueco la Virgen de la Esperanza de la Paz. En Torreblanca, la Virgen de Esperanza y Caridad recordará aquellas primeras salidas de la Virgen de los Dolores por el barrio, al pie de la cruz. Y, por último, en San Antonio de Padua veremos a la primera Divina Pastora de este año, la que pondrá el punto final a una jornada que a la mañana siguiente comenzará bien temprano.

Sí, porque a primera hora El Cerro, San Julián, San Pedro, San Nicolás, El Tardón y Torreblanca rendirán culto al Santísimo, preludiándonos un Corpus para el que apenas faltan unos días. También por la mañana Los Gitanos sacarán su Cruz de Mayo. Ya por la tarde, la de La Estrella pondrá fin al ciclo de pasos infantiles, que no volverán a procesionar hasta los días previos a la Semana Santa en los patios de distintos colegios.

Pero la cosa no acaba ahí, porque en El Porvenir saldrá la Virgen del Prado. En la Ronda, hará lo propio la Divina Pastora de Capuchinos. Y, en San Lorenzo, María Auxiliadora de San Vicente cerrará el ciclo de las Reinas Salesianas de Sevilla, llegando de nuevo a casa cuando aún le queden a este mes algo más de 24 horas por vivir, pero ningún paso que ver por las calles. Afortunadamente, aún podremos asistir a más salidas, pero ya serán en junio.

45 años de la basílica de San Lorenzo

Hace justo 45 años, coincidiendo con los primeros minutos del día 28 de mayo, la hermandad de El Gran Poder dejaba para siempre la parroquia de San Lorenzo para residir en su propio templo. Fue el colofón de un día de la Ascensión que se celebró por todo lo alto en la ciudad, con la salida tanto del Señor de Sevilla como de la Virgen del Mayor Dolor y Traspaso en sus respectivos pasos rumbo a la Catedral. Curiosamente, el palio fue acompañado musicalmente por primera vez en la historia. Por la tarde, ambos regresaron a la plaza en la que llevaban viviendo desde 1703, aunque con un destino distinto.

En aquella ocasión, la puerta de San Lorenzo volvió a estar abierta, pero sólo para reverenciar el paso de la cofradía que entró en un nuevo templo edificado justo al lado y que sería consagrado el día siguiente bajo la advocación del Señor del Gran Poder. A partir de ahí, tanto la parroquia como el resto de Sevilla hubo de acostumbrarse a la nueva residencia de la corporación de la Madrugá, así como a que su sitio de siempre lo ocupase, tres años más tarde, la hermandad de La Bofetá.

Hoy, 45 años después aquella iglesia cuya estructura estaba inspirada en la del Panteón de Roma es , un poco más moderna y con algún que otro retoque, santo y seña de la cofradía, que allí vivió cómo se le dio Carta de Hermandad a Santa Genoveva (antes de que se cumpliera el mes de la 'mudanza'), la elección del Señor para presidir en dos ocasiones el Vía Crucis del Consejo (1979 y 1987), las salidas del palio sin el San Juan (1985 y 1986), la beatificación de Marcelo Espínola (1987), varias restauraciones de sus titulares, la concesión de la medalla de oro de la ciudad al Cristo (1995) y, sobre todo, la consideración como Basílica Menor por Juan Pablo II en 1992.

Éso por no hablar del sinfin de emociones y vivencias de las que habrán sido testigos sus muros, que llevan prácticamente una vida custiodiando al Gran Poder, salvo durante los 7 meses, de abril a noviembre, que pasó en 2008 en el convento de Santa Rosalía por obras. Y es que lo que hace 45 años fue una auténtica novedad, hoy es parte de la tradición. Porque el año 1965 nos dejó una imagen para la posteridad, la de la entrada del Señor de Sevilla en su propia casa. Aunque, quizás, lo más sensato sería decir que su casa ha sido, es y será siempre la ciudad, y que en su basílica sólo 'para' a descansar.

El año de las extraordinarias

A este paso, el 2010 se va a convertir en el año con el récord absoluto de salidas procesionales extraordinarias en Sevilla. De hecho, hace un par de semanas vivimos la primera, la de la Virgen del Buen Fin de La Lanzada con motivo del bicentenario de su hechura. Y todavía nos quedan por delante las de La Estrella, Montesión, La Macarena y Los Panaderos, esta última por dos veces. Sí han leído bien, porque la Virgen de Regla saldrá en septiembre para ser coronada canónicamente y antes, el 11 de junio (horas antes de que en San Jacinto vuelva a respirarse el aire de un Domingo de Ramos), lo hará por las calles de la feligresía en andas.

Inicialmente, la corporación de la calle Orfila había pensado realizar, con motivo de la coronación, un triduo itinerante a la Virgen en las parroquias de los tres barrios de la ciudad en los que ésta tiene más hermanos. Sin embargo, el Arzobispado no autorizó esta medida, que, finalmente, ha sido sustituida por esta salida extraordinaria durante la cual se realizará el rezo de la Corona de las Doce Estrellas, compuesta por San José de Calasanz hacia 1628. Además, visitará los templos de San Martín, San Juan de la Palma, Montesión, San Pedro y la Misericordia, además de los conventos de las Hermanas de la Cruz y El Pozo Santo.

Así, podrán disfrutarse de estampas inéditas que evocarán los recuerdos del último Miércoles Santo y servirán de preparación a la coronación canónica de septiembre. Y es que la Virgen de Regla será la primera que salga hasta tres veces en el mismo año, todas con un ambiente diferente, pero siendo siempre el centro de atención de quienes se acerquen a disfrutar de su hermosura por las calles de la ciudad. Porque habrá quienes critiquen tanta salida extraordinaria, pero todos los puntos del recorrido se volverán a llenar de gente que ve que aún queda un mundo para una nueva Semana Santa, pero que gracias a cosas como ésta parece que están mucho más cerca. De hecho, es justo que en el año en el que estamos obligados a esperar más que nunca entre un Domingo de Ramos y otro sea también el más prolífico en procesiones extraordinarias.

Y cien

Hace casi tres meses y medio, el 17 de febrero, Miércoles de Ceniza, echaba a andar este blog con la intención de demostrar que se podía hablar de cofradías todo el año, mucho más allá de la Cuaresma y la Semana Santa. Así, desde entonces, no ha faltado ni un sólo día a su puntual cita con la actualidad cofrade, analizando cualquier aspecto que estuviese sobre la mesa en cualquier tertulia cofrade. Así, han ido pasando los días, hasta llegar a hoy, cuando esta humilde bitácora llega a su actualización número 100.

Parece que fue ayer cuando 'asomaba la cabecita' anunciando el estreno de una nueva Cuaresma o cuando, al día siguiente, se hacía eco de la inclusión de la hermandad de El Sol en la nómina oficial. A partir de ahí, se hizo eco de todo cuanto aconteció en una previa a los días grandes en la que estuvimos más pendientes del cielo que de costumbre. Después llegó una Semana Santa que se quedó incompleta por la lluvia del Lunes Santo, pero en la que recuperamos la normalidad en la Madrugá. Más tarde, el debate sobre el posible traslado del Señor de las Tres Caídas de Triana a Madrid acaparó varias actualizaciones de camino a un mes de mayo en el que las Glorias, las Cruces de Mayo, las 'ilegales' y la extraordinaria del Buen Fin nos han hecho mucho más llevadera la espera.

Y así hasta hoy, cuando el contador de entradas escritas llega por primera vez a los tres dígitos. Atrás quedan horas de trabajo, pendiente de la actualidad para que no falte un tema al día ni un evento importante en la agenda. Sin duda, la mayor recompensa se encuentra, más allá de los más de 500 votos recibidos en los premios Blogosur (donde podeis volver a votar pulsando sobre el baner de 'Yo soy bloguer@ de Sevilla'), es ver como esta aventura sigue viva y, lejos de quedarse estancada, sigue creciendo. Un millón de gracias por vuestras visitas y apoyo, tanto a los lectores habituales, como a los que lo hacen puntualmente. Queda prometido continuar en la misma línea para mejorar un poco más cada día, porque quedan tantas cosas por contar y tantísimas ganas de hacerlo que 100 actualizaciones se quedan demasiado cortas. Así que, a partir de mañana, más.

Protagonismo salesiano

Ayer, casi a la misma hora en la que muchos romeros comenzaron a apurar sus últimas horas en la aldea del Rocío, Sevilla volvía a reencontrarse, por todo lo alto, con una de sus advocaciones marianas más importantes, la de María Auxiliadora. Ya había vivido un anticipo el viernes pasado en Su Eminencia, pero esta semana estará casi por completo marcado por las salidas procesionales de la Reina Salesiana.

De hecho, en las últimas 24 horas dos colegios vinculados con estas órdenes religiosas vivieron su día grande. Así, en Triana, San Juan Bosco y María Auxiliadora volvieron a llenar de ambiente cofrade las calles del viejo arrabal. Mientras, en Nervión, desde la escuela regentada por las monjas salesianas, los sones de la banda de música de Nuestra Señora del Sol anunciarán la llegada de una Virgen que traerá alivio y consuelo a los enfermos de San Juan de Dios.

Pero la cosa no acabará ahí. En los próximos días, María Auxiliadora también saldrá por la collación de San Vicente y, como no, el próximo sábado, desde la basílica que lleva su nombre en La Trinidad. Allí, paseará precedida por San Juan Bosco y coronada canónicamente. Mientras, en el Polígono Sur andará al paso que marquen sus costaleras y siendo acompañada, por primera vez en su historia por Don Bosco. Y es que la hoja del mes más importante de las Glorias está a punto de caer arrancada del calendario, pero, como siempre, vamos a poder despedirnos de él por todo lo alto.

Todos los caminos llevan a Almonte

Para muchos es uno de los momentos más importantes del año, grabado a fuego en el calendario. Para otros, una fecha más, en la que el folklore se disfraza de religiosidad en torno al palio de una Virgen que procesiona por una aldea. Pero, con independencia de las consideraciones que cada cual haga sobre el Rocío, lo cierto es que hoy, como cada Lunes de Pentecostés, todo el mundo cofrade mira hacia Almonte.

Allí, desde que el reloj marcó la medianoche, la ermita de la Blanca Paloma se convirtió en el principal foco de atención. Primero, con un Rosario en el que participan todas las hermandades que se han desplazado a las marismas para vivir 'in situ' la romería. Después, y tras horas de espera delante de una reja, con una procesión en la que la Virgen del Rocío volvió a ser paseada por los suyos por los terrenos donde, siglos atrás, se le apareció a aquel pastor al que le pidió quedarse a vivir allí para siempre.

A partir de ahí, más de 12 horas de fervor, de salvas y salves a una Virgen capaz de robar el corazón tanto a almonteños como a foráneos. Como siempre, miles de intentos por tocar su manto, por rozar su palio. Una vez más, las bullas por doquier, los empujones por respirar el reflejo del aire en el paso. Así, hasta que al filo del mediodía, todo pertenezca ya al recuerdo, haciendo que todo lo vivido en las últimas horas sea casi como un sueño que se diluye al despertar. Será entonces cuando se inicie un nuevo camino, ése que lleve a los romeros a sus puntos de partida, ya sin la Aldea como meta pero todavía con el regusto en los labios de un nuevo Rocío, ése que hasta dentro de unas horas podrá vivirse todavía en Almonte.

Costaleras de Sevilla

Para muchos, hablar de un barrio como el Polígono Sur es hacerlo de una de las  peores zonas de la ciudad, de un punto a evitar en el callejero en el que la droga, la prostitución, la delincuencia y la marginación son las notas predominantes. Sin embargo, más allá de lo que tristemente dice conocer la mayoría de esta zona de Sevilla, en ella se vive el mundo de las cofradías como en cualquier otro sitio. No en vano, este año han vivido el estreno en Cuaresma de su agrupación parroquial, la de Bendición y Esperanza; el pasado martes salieron de cerca de allí los primeros romeros hispalenses camino de El Rocío, con la hermandad de Sevilla Sur, y la semana que viene pondrá en la calle a una de las principales advocaciones marianas de la ciudad, la de María Auxiliadora.

Concretamente, en este caso, con una importante particularidad, ya que en el Polígono Sur caminará al paso que marquen las mujeres, ya que será portada, un año más, por la cuadrilla decana de las costaleras de Sevilla. Y es que este barrio, repudiado por muchos, también es ejemplo para el resto en detalles como éste, puesto que hace tres años fue el primero en crear una cuadrilla íntegramente femenina, algo que meses después, en julio, también ocurriría con el paso de Santa Teresa en el Santo Ángel, donde en enero de aquel 2007, se vio el debut de una mujer en las trabajaderas en la cuadrilla mixta del Niño Jesús de Praga.

Sin embargo, el mérito de apostar por algo totalmente nuevo en Sevilla hay que atribuírselo a este barrio de la zona sur de la ciudad, que no dudó cuando iba a estrenar la talla de su Virgen de María Auxiliadora que también había llegado el momento del inicio de una nueva etapa en el mundo del costal. Una que todavía no ha llegado a tener continuidad en las hermandades penitenciales, donde la mujer ya viste túnica y antifaz casi en todas (pulsa aquí para leer más al respecto), incluso ocupan cargos en juntas de gobierno y cuerpo de acólitos, pero no tienen las mismas posibilidades que el hombre de ponerse la faja y el costal. En este sentido, y como ya vaticinó hace unos años Antonio Santiago, "parece imposible pensar que en unos años no haya presencia femenina bajo los pasos de Semana Santa". Será entonces el momento de hacer memoria y mirar dónde se inició este fenómeno que en el Polígono Sur tiene su mejor muestra cada año a finales de mayo.

El día de la Esperanza

Andamos desde hace un tiempo pendientes del posible traslado del Señor de las Tres Caídas a Madrid (pulsa aquí para leer la última actualización al respecto) y la semana se acaba con otro por sorpresa. Y no de una imagen cualquiera, sino la de la mismísima Señora de Sevilla, la Esperanza Macarena, que el día 18 de septiembre irá, en Rosario de la Aurora, hasta el Estadio de La Cartuja para presidir la beatificación de Madre María de la Purísima, de las Hermanas de la Cruz.

El 'bombazo' informativo se gestó en un cabildo extraordinario que tuvo lugar en la noche del pasado jueves y en el que la junta de gobierno que preside Manuel García aprobó esta decisión "por los íntimos lazos que unen a la corporación de San Gil con la de las Hermanas de la Cruz". En este sentido, y aunque aún se desconocen muchos detalles al respecto, se tiene claro que la Virgen saldría a primera hora de la mañana, en torno a las 7.00 horas, rumbo a La Cartuja a la que, presumiblemente, llegaría cruzando el puente de La Barqueta. Así, La Macarena cruzará por primera vez el Guadalquivir, al modo en el que lo hace su homónima de Triana cada Madrugá, llegando al Estadio sobre las 10.00 horas.

A partir de ahí, se desconoce si irá en andas o bajo palio, así como si el regreso se haría a modo de procesión gloriosa por la beatificación o como Vía Lucis. Lo que sí está confirmado, a tenor de la importancia de este traslado, es que este año, el día de la Esperanza, que tradicionalmente se celebra el 18 de diciembre, se adelantará tres meses, al ver por las calles de la ciudad a La Macarena. Y es que, si ya es grande para Sevilla ver a una madre superiora de las Hermanas de la Cruz camino de los altares, que su devoción mariana dolorosa más insigne salga a la calle para celebrarlo lo eleva todo a la máxima potencia. Por ello, la expectación que ha levantado la noticia es máxima, tanto que, según comentan, ya están preparando un palco en el Cielo para que no se pierda nada de un momento tan grande 'Madre Angelita'.

La verdadera 'cofradía de los niños'

Tradicionalmente se ha considerado a La Borriquita como 'la cofradía de los niños', ya que son ellos los que monopolizan su cortejo. De igual modo, hay otros, como Víctor García Rayo, que afirman que esa denominación debería recaer en El Silencio, puesto que, a su juicio, es la hermandad que más impacta a un pequeño cuando la ve por primera vez. Sin embargo, si en Sevilla hay una corporación que, aún sin túnicas ni capirotes, puede adecuarse a la perfección a este calificativo es, sin duda, la de la Cruz de Mayo de El Lavatorio, que hoy recorrerá las calles del centro.

En efecto, se trata de una 'minicofradía' hecha por y para los niños, con más de un cuarto de siglo de antigüedad y dos pasos al modo de los que pasean por las calles los mayores. El primero, con el misterio en el que Jesús lava los pies a sus discípulos, tal y como aparecía en el de aquella extinta hermandad de Santa María la Blanca, parroquía a cuya vera nació. Lo mismo ocurre con la Virgen, que recibe por herencia también al advocación de Nuestra Señora del Pópulo y que paseará bajo palio. Entre ellos, la juvenil del Sol pondrá los sones de cornetas y tambores, que acompañarán también a niños portando insignias como la cruz de guía, el estandarte o las bocinas, para que a la procesión no le falte nada.

Así, al igual que harán otros pequeños también esta tarde con las Cruces de Mayo de La Soledad de San Buenaventura, La Trinidad o Paz y Misericordia de Rochelambert, los que formen el cortejo de esta peculiar hermandad traerán a las calles el más puro sabor a cofradías. En este caso, lo harán en pleno centro, con dos pasos y unas formas que recordarán muy mucho a la Semana Santa. La única salvedad será el tamaño de las parihuelas y los costaleros. Sin embargo, la ilusión será la misma que en cualquiera de las corporaciones grandes, ésas a las que muchos llegarán, dentro de unos años, desde esta verdadera 'cofradía de los niños'.

Esto no para

Casi no han desaparecido las carretas de las hermandades del Rocío por el Aljarafe y ya pensamos en el Corpus. Lo hacíamos ya desde hace unas semanas, cuando comenzaron a levantarse en la plaza de San Francisco las portadas por las que debe pasar la procesión del Santísimo y que, en esta ocasión, traerán los aires trianeros de la fachada de la capilla de La Estrella, por su 450 aniversario. Pero, desde hace unos días, la cercanía del "tercer jueves del año que reluce más que el sol" se hace más que patente, puesto que ya conocemos su cartel anunciador.

Se trata de una fotografía perteneciente al archivo de Serrano y tomada en los años 20. En ella, se ve a la Custodia de Arfe a su paso por el Palacio Arzobispal entre una gran multitud. Además, se perciben varios detalles curiosos, como la devoción del público, que se despoja de sus sombreros en señal de respeto ante la cercanía del paso; los efectos del calor en las velas de éste, que aparecen torcidas; cómo las tropas escoltaban al Santísimo, con sus bayonetas en alto tras Él, y el modo en el que se engalanaban con colgaduras los balcones de la sede de la Archidiócesis.

Con todo, el cartel, editado por el Ayuntamiento, hace una particular revisión a una tradición tan arraigada en Sevilla como la del Corpus, que si bien ha podido diferir en cuanto a las formas que rodean a su celebración y procesión, continúa, en esencia, intacta, constituyendo uno de los días más grandes de la ciudad. Será dentro de un par de semanas cuando, tras una tarde de traslados y montajes de altares, la capital hispalense viva una mañana en la que la gloria paseará por sus calles, empezando desde bien temprano y finalizando cuando el Sol caiga en la ojiva de San Julián con el retorno de La Hiniesta gloriosa. Antes, al mediodía, las calles habrán disfrutado de la vuelta a casa del Señor de la Cena y, sobre todo, de esa procesión singular y kilométrica que termina de salir cuando empieza a entrar. Para eso, aún quedan 14 días, pero Sevilla empieza a prepararse ya.

Sevilla ya va andando camino de las arenas

La actualidad cofrade ya mira hacia Almonte, hacia la aldea de El Rocío. Hasta allí echó a andar ayer, a primera hora, la hermandad de Sevilla Sur. Hoy, justo cuando se cumplan 24 horas del inicio de su camino, harán los propio las de Triana, La Macarena, El Cerro y la castrense de Tablada, llenando la ciudad de carretas, romeros y simpecados. Mañana será el turno de la hermandad de El Salvador, que será la última de las hispalenses que cruzará las arenas en busca de la ermita de la Blanca Paloma.

Pero ninguna se irá sola. De hecho, como sucede con todo, Sevilla se echará a la calle para despedirlas, a pesar de que salgan muy temprano y de que, en muchos casos, roben horas de sueño a sus vecinos con el retumbar de sus cohetes. Por eso, zonas como San Jacinto o Feria vivirán bullas idénticas a la de los días grandes de la Semana Santa, salvo por el hecho de que los volantes sustituirán a las túnicas y los sones de flauta y tamboril a los de las cornetas y lo tambores.

Es la forma en la que la ciudad vivirá las únicas horas de El Rocío que tienen lugar dentro de sus propias fronteras. Ésa que finalizarán cuando el último simpecado se pierda por El Aljarafe. A partir de ahí, Sevilla irá andando, como reza la canción, camino de las arenas, rindiendo cumplido tributo a una devoción casi milenaria y que muchos se han encargado de trivializar y devaluar. Pero aún así sigue vigente y se renueva cada semana previa al Lunes de Pentecostés, cuando la capital hispalense se viste de romera y emigra a una aldea en la que una Virgen la espera.

A mi compañera de bullas

¿Qué sería de todo cofrade sin la compañía adecuada? Probablemente, algo muy distinto. De hecho,  con la de horas que uno se lleva en la calle viendo pasos durante la Semana Santa, cómo para ir a disgusto. En este sentido, es más que probable que todo 'capillita' tenga un 'partener' fetiche para esos días. Yo, para no ser menos, también tengo la mía, alguien con quien tengo la suerte de compartir mi vida desde hace justamente seis años. Por eso, me van a permitir que le dedique directamente a ella esta actualización que, espero y deseo, tenga a bien leer.

Recuerdo como si fuera ayer aquellos días de nazarenos y pasos de 2004, cuando desde el Viernes de Dolores estuve pendiente de cómo proponerle quedar un día, algo que hice el Sábado Santo, esperando una respuesta positiva que hiciese todavía más grande aquel Santo Entierro Magno. No hubo suerte, aunque aquello sí motivó un acercamiento sin el que, sin duda, el Domingo de Ramos siguiente lo habríamos pasado por separado.

Así, afortunadamente, en pleno mes de las Glorias, toque el Cielo con las manos. Al cabo de unos meses, en un banco de Nervión, me tocó hacer la confesión de que era un enamorado de las cofradías, algo que tardé en decir abiertamente por miedo a tu reacción. Sin embargo, como tú dices, ya sentías algo por mí que no te permitía censurarlo, por lo que desde ahí el tiempo fue convirtiéndose en un cursillo acelerado de hermandades y pasos. Y en ésas llegó el Domingo de Ramos, ése en el que estrené aquello que más ansiaba, poder pasear contigo del brazo. De aquella Semana Santa nos quedará para siempre la anécdota de unas patatas que mancharon un traje de Cigarreras, una Madrugá con susto incluído en Alfonso XII y aquella saeta peculiar en La Alfalfa ante los pasos de La Trinidad. Pero, ante todo, fue la primera Semana Grande en la que entre bullas, esperas y programas pude disfrutar a tu lado.

A ella siguieron cinco más. La de 2006, con aquellas lágrimas de emoción que despertó una 'revirá' de Jesús Despojado. Aquella infame de 2007, en la que el trabajo nos privó a los dos del Domingo de Ramos, la lluvia de San Benito y en la que el Jueves Santo estuvo marcado por las lágrimas que caían del Cielo por una tarde plagada de reencuentros. ¿Cómo olvidar tu apoyo tras aquella 'Hora Nona' y durante aquellos días de Pasión y Muerte que nos tocaron en suerte? Ahí estuviste, como siempre, a mi lado, sacándome a flote.

Menos mal que en 2008 las aguas volvieron a su cauce y salvo las precipitaciones no hubo ningún otro susto. Ya por entonces empezabas a tener tu propio criterio, encandilándote con las marchas de Virgen de los Reyes, con los vellos de punta con los cambios del Pilatos de San Benito o, como en 2009, volviendo a emocionarte con detalles como El Cristo de Burgos volviendo por su plaza con la penumbra como única compañía.

¿Y qué decir de esta última? En la que más que nunca has sido la mejor compañía. Ésa en la que no te has  tomado días sabáticos y donde no has parado de sorprenderme con tus avances en el mundo 'capilleril', llegando a rectificarme con razón en varios detalles y aprobando, para siempre, 'Primero de Bulla'. Ahora, de cara a 2011 quedan la promesa de unas 'prácticas' en las que te enfrentarás a un reto, diseñar el recorrido íntegro de un día, y un deseo, el de poder compartir el resto de mis Semanas Santas contigo. Porque tras seis a tu lado, no me imagino ninguna lejos de ti. Quizás porque tú eres quien de verdad la hace diferente o porque, a día de hoy, mi Semana Santa eres tú.

Y todo sigue en el aire

El 15 de mayo era la fecha tope para que la hermandad de La Esperanza de Triana decidiese formalmente si el Señor de las Tres Caídas viajaba o no a Madrid el año que viene para intervenir en el Via Crucis con el que se quiere agasajar al Papa Benedicto XVI. Sin embargo, estamos ya a día 17 y todavía nada se sabe al respecto. Es más, desde la corporación de la calle Pureza aún no se ha convocado el cabildo general extraordinario en el que se debe discutir el tema, por lo que todo sigue estando en el aire.

Y eso que había muchos que veían que con la visita del Cristo al IAPH se iban a acelerar los trámites. Pero nada más lejos de la realidad. Aquel hecho, que tuvo lugar entre el 26 y el 28 del mes pasado, se cerró sin mayores noticias que unas breves conclusiones (para leerlas pulsa aquí) en las que se anunciaba que el estado de conservación de la talla era bueno. En este sentido, cabría resaltar que no fue la hermandad la que dio a conocer estos datos, sino que éstos fueron filtrados por la web Artesacro.org. De hecho, desde la corporación todavía no se ha dicho nada al respecto, ni siquiera se ha puesto fecha a una explicación detallada del estudio al que se sometió al Señor en La Cartuja.

Total, que seguimos igual que justo al final de la Semana Santa, cuando saltó la noticia de que existía la posibilidad del traslado, pero sin que aún haya nada definitivo. Lo único que sí ha cambiado es que el debate al respecto acapara todo el protagonismo en los mentideros cofrades, sobre todo en internet, donde los partidarios del sí y, sobre todo, los del no hacen campaña a diestro y siniestro. Incluso hay quienes interpretan que el mutismo de la hermandad con respecto a este tema es fruto de que la decisión de no ir a Madrid ya estaría tomada. Sin embargo, nadie confirma ni desmiente. Por tanto, habrá que seguir esperando para ver si el Señor de las Tres Caídas avanza entre izquierdazos por La Castellana o si, por el contrario, se quedará en su casa de la calle Pureza. En unos meses saldremos de dudas.

La Alegría vuelve a San Bartolomé

Hace 28 años, la parroquia de San Bartolomé se quedó huérfana de túnicas y capirotes. Fue durante el Domingo de Ramos de 1982, cuando la hermandad de Jesús Despojado salió por última vez de allí y entró, por primera vez en su historia, en la que hoy es su actual sede canónica: la capilla de Molviedro. Desde entonces, el templo de la Puerta de Carmona se quedó al margen de las cofradías, resucitando sólo, de manera efímera, cada mes de mayo, cuando toda la Alegría de la feligresía pasea por sus calles sintetizada en una pequeña Virgen a la que mira su Hijo, al que sostiene en brazos.

Y es que dentro de unas horas, el barrio de San Bartolomé se reencontrará con su vecina más antigua, ésa que nació de la gubia de Roque Balduque en el siglo XVI y que desde 1.678 ostenta su patronazgo, tal y como lo indica el cetro que sostiene en su mano derecha. Ella, como viene haciendo desde hace casi tres décadas, será la que vuelva a hacer sonar marchas de Semana Santa a los pies de un templo que durante los días grandes ha de conformarse con los ecos lejanos que de ellas le regalan hermandades como San Roque, San Esteban, San Benito o San Bernardo. Porque hoy, a diferencia del resto del año, la fachada de esta iglesia que tan desapercibida aparece ante nuestros ojos rebosará Alegría, tiñéndose del rosa palo del manto de su Virgen.

Será un nuevo milagro más de esta imagen mariana, cuya devoción llegó a San Bartolomé de manos del mismísimo Rey Fernando el Católico y que sus vecinos han ido renovando año a año. Así, se paseará majestuosa por sus estrechas calles, derrochando la grandeza María Santísima, destilando Glorias a cada paso. Y es que hoy es un día grande para la Puerta de Carmona, es el domingo en el que la Alegría, más que nunca, se siente en el barrio.

Que no nos falte de nada

Desde que comenzó el mes de mayo, no podemos quejarnos de ambiente cofrade. Sobre todo los fines de semana, en los que casi no hay esquina de la ciudad en la que no podamos ver un paso. Pero, sin duda, el día de hoy se lleva la palma, ya que, salvo túnicas y capirotes, podremos disfutar de un sinfín de posibilidades cofrades. Así, Sevilla volverá a escuchar diálogos entre varales y bambalinas junto al templo mudejar de San Marcos. Desde allí, saliendo de la capilla de Los Servitas, la Virgen del Buen Fin de La Lanzada regresará a San Martín en loor de multitudes, llegando por primera vez en su historia a puntos como El Pumarejo o la calle Feria.

Pero no será la única imagen mariana que pasee por las calles hispalenses hoy. De hecho, tendremos nuestra ración de Glorias en Las Avenidas, con la salida de una Virgen de la Salud que, a falta de parroquia ,volverá a demostrar cómo el cariño de los suyos es capaz de mover montañas. Más lejos del centro, los barrios de Valdezorras, Los Arcos y Sevilla Este saborearán el más puro sabor a mayo gracias a la Virgen de las Veredas, a la de  la Soledad y a la de la Misericordia, respectivamente.

Incluso, habrá un Cristo que saldrá esta tarde. Será en Santa María de Ordás, donde el Señor de la Humildad y los sones de Virgen de los Reyes nos transportarán, por unos momentos, a nuestra Semana Mayor. Y, por si fuera poco, no faltarán Cruces de Mayo. Como las de Los Negritos, Santa Genoveva y La Mortaja y San Pablo. ¿Algo más? Pues sí. Porque desde el mediodía, junto al Sánchez Pizjuán, resonarán con fuerza las marchas procesionales que interpreten las bandas participantes en el certamen Pro-Haití que organiza la hermandad de San Benito.

Como ven, si hoy hay alguien que se queda sin disfrutar de ambiente de cofradías es, simplemente, porque quiere. Y es que es cierto que la jornada de hoy no es para nada comparable a cualquiera de Semana Santa, pero sí es de ésas que hacen mucho más llevadera la espera. Porque esta noche, cuando muchos regresen a sus casas tras paladear tan profuso menú, mirarán al cielo y dejarán escapar, junto a un suspiro, una frase que sintetiza un sinfín de sensaciones en apenas tres palabras: Ya queda menos.

Una Madrugá al revés

Esta noche, cuando el reloj llegue a las doce y la Virgen del Buen Fin de La Lanzada salga de la parroquia de San Marcos y, tras rodearla, entre en la capilla de Los Servitas, Sevilla tendrá morriña de la Madrugá. Y es que ver una imagen por las calles más allá de la 'hora bruja' lleva casi implícita la alusión a la única jornada de nuestra Semana Santa en la que todas las cofradías coinciden bajo la luz de la luna.

Quizás por ello, la actualización de hoy va dedicada a ella, aportando un nuevo punto de vista que, además, podría solucionar, en parte, sus principales problemas de horario. Para ello, no sería necesario reducir los cortejos de sus hermandades, sino, simplemente, reformular un poco la Carrera Oficial. En este sentido, si se rescatase lo que durante muchísimos años se hizo el Sábado Santo, poniendo el palquillo en Virgen de los Reyes, siguiendo después por la Avenida de la Constitución, Plaza Nueva, Méndez Núñez y terminando en la Magdalena, no sólo se eliminarían puntos conflictivos como los de Reyes Católicos (cruce de La Esperanza de Triana y El Gran Poder) o Cuna-Orfila (La Macarena y Los Gitanos), sino que, además, se evitarían rodeos kilométricos como los que tiene que dar la corporación de San Lorenzo por El Arenal.

Así, la Madrugá podría comenzar a la misma hora que actualmente, justo a la medianoche en La Macarena, ya que tanto la corporación del Arco como las de El Silencio y El Gran Poder no tendrían que efectuar cambios a este respecto. Sí los habría en Carrera Oficial, que se abriría a las 3.05 horas por parte de la 'Madre y Maestra' que, por otra parte, podría regresar a casa media hora antes que ahora, a las 5.00 horas, pudiendo bajar directamente por La Campana. Más tiempo ahorrarían el Señor de Sevilla, que podría entrar a las 7.00 horas en lugar de a las 8.00 horas, y la Señora de San Gil, que estaría en su basílica a las 12.30 horas.

Por su parte, El Calvario saldría a las 4.30 horas (45 minutos más tarde), entrando a la misma hora que actualmente. La Esperanza de Triana pondría su cruz de guía en la calle a las 3.15 horas (60 minutos más tarde), pudiendo regresar a las 12.45 horas. Finalmente, Los Gitanos se echarían a la calle a las 3.45 horas (45 minutos más tarde), llegaría a la Catedral a las 7.50 horas (casi igual que ahora) y cerraría la jornada hacia las 14.00 horas. Sería, pues, una opción interesante y que podría beneficiar a la organización de una noche con importantes dificultades en este sentido. El tiempo dirá si la solución a los problemas de horario de la Madrugá puede conseguirse a través de esta idea o con otras. Lo que sí es cierto es que, independientemente del modo, es fundamental lograrlo, sobre todo para el buen funcionamiento de una noche de la que los cofrades nos acordamos todas las demás del año.

El segundo jueves del año

Hace poco más de mes y medio dejamos atrás el primero de los tres jueves que, según reza el refrán, relucen más que el sol. Así, el pasado día 1 de abril vivimos un espléndido Jueves Santo en el que no faltó nada. Ahora, el calendario nos ofrece la posibilidad de disfrutar del segundo, puesto que hoy, 13 de mayo, es el día de la Ascensión, ése en el que conmemoramos la subida al Cielo, en cuerpo y alma, de la Virgen María.

Es por tanto, una fecha de marcado carácter mariano y que, en esta ocasión, vamos a poder vivir con una imagen de la Madre de Dios por las calles de la ciudad. No será en procesión, sino en un traslado que servirá de antesala a una salida extraordinaria que, el próximo sábado, permitirá que la ciudad vuelva a reencontrarse con un paso de palio. Se trata de la visita que la Virgen del Buen Fin, titular de la hermandad de La Lanzada, rendirá a la parroquia de San Marcos, con motivo de los actos conmemorativos de sus primeros 200 años de vida.

Así, la talla regresará al templo en el que tuvo sus orígenes, dando lugar a una estampa casi inédita para los cofrades de Sevilla, haciendo más especial esta fecha que, en la mayoría de los casos, pasa desapercibida en los calendarios. Y es que de los tres jueves más importantes del año, éste siempre ha estado un tanto huérfano. No en vano, no cuenta con el revuelo de túnicas y capirotes del Jueves Santo, ni con el esplendor Eucarístico del Corpus. Sin embargo, este año, gracias a la Virgen de  La Lanzada sí contará con un sello propio más allá de los cultos y misas. Puede que sea una simple casualidad, pero hoy podría decirse que el ostracismo del día de la Ascensión llega a su Buen Fin.