Zafarrancho otoñal

Hoy, siempre y cuando el cielo no lo impida, tendremos por delante una jornada eminentemente cofrade. De hecho, comenzará con sones de marchas procesionales bien temprano, casi después del desayuno, cuando arranque en Sevilla Este un certamen de bandas organizado por la jovencísima corporación del Cristo del Consuelo y en el que, además de agasajar nuestros oídos con composiciones que nos llevarán mentalmente hasta los días grandes, se recogerán alimentos para los más necesitados. Es más, la entrada al evento será precisamente eso, un kilo de comida no perecedera.

Y este acto sólo será el anticipo de lo que nos espera por la tarde, donde el mes de septiembre aprovechará su último sábado para despedirse de nosotros por todo lo alto. Lo hará en el centro, con la salida de la Virgen de los Reyes, Patrona de los Sastres, desde San Ildefonso, evocando a su paso ese verano que ya dejamos definitivamente atrás. Pero también en La Calzá, a los pies de la Virgen de Valvanera, que volverá a poner ambiente de incienso y bulla a un barrio que, un año más y ya van tres, cuenta los días que faltan para poder reencontrarse con el Martes Santo. Mientras, la zona del Museo se llenará de solidaridad y solera junto a las Mercedes de la Puerta Real, al tiempo que San Jerónimo verá procesionar a su Patrón.

En Triana, doble sesión de pasos. Por un lado, la Estrella Gloriosa y, por otro, la Virgen del Buen Aire. Ambas llevarán este zafarrancho otoñal de cofradías a la orilla más marinera de Sevilla, haciendo que no le falte de nada en este inicio de fin de semana donde lo complicado será no ver pasos por la calle. No en vano, habrá prácticamente uno por cada barrio y rincón de la ciudad. Una verdadera bendición que caerá casi del cielo (si es que este prefiere no derramar nada más sobre nuestras cabezas) para endulzar una espera que sigue avanzando con paso firme y, como las buenas cuadrillas, poco a poco y sin correr.