Como buena hermana de Los Gitanos

Poco a poco, la revolución de la TDT se va calmando y las cadenas locales van nuevamente floreciendo. Y, con ello, también los programas cofrades, aunque lo cierto es que algunos lo están teniendo mucho más fácil que otros. Por ejemplo, desde que dieron sus primeros pasos, 'El Programa' de Moisés Ruz no se ha movido de Giralda TV, mientras que 'Semana Santa de Sevilla' ha regresado felizmente para muchos en la recién estrenado TeleSevilla (recuérdalo aquí). Sin embargo, ha habido quien lo ha tenido mucho más complicado para encontrar su sitio.

Es el caso de Irene Gallardo, a quien la reconversión de CRN en Giralda la mandó al paro y que desde hace unos meses aparece y desaparece de las ondas por los caprichos y acuerdos de la productora en la que trabaja, Absalon. Así, volvió a la actualidad catódica tímidamente a finales del pasado año, con 'Luz Cofrade', en Canal Luz, que desapareció de la parrilla y después regresó hace apenas unas semanas bajo el nombre de 'Entre Cofrades'. Sin embargo, desavenencias de la cadena provocaron que llegase a desaparecer de la programación, regresando poco después aunque de manera efímera. Sobre todo, porque a partir de ahora será Cadena local de Sevilla la que lo emita. Así, en apenas un año, la periodista habrá pasado por tres cadenas diferentes y otros tantos espacios, algo inaudito para alguien de su valía en el mundo de la información morada.

En este sentido, casi se podría decir que esta viviendo lo que su hermandad de Los Gitanos sufrió mucho tiempo, un camino errante por distintas casas hasta dar con la suya. De hecho, no quedan demasiado lejanos los tiempos en los que la corporación de la Madrugá salió de San Román, Santiago o Los Terceros, y si nos remontamos mucho más atrás podemos tener en cuenta su paso por barios como Triana o San Nicolás. Todo hasta que hace doce años estrenaron por fin su santuario, en el que estarán a perpetuidad. Ojalá este simil valga también para la buena de Irene Gallardo, ya que desde hace tiempo lleva haciendo méritos propios para no ser una secundaria del mundo cofrade en las ondas, sino una protagonista más del panorama catódico del periodismo morado.