sábado, 20 de julio de 2013

La penúltima

Poco a poco vamos consumiendo el ciclo del Carmen, que lleva acompañándonos prácticamente una semana. De hecho, hoy disfrutaremos de la penúltima salida procesional del mismo, que tendrá lugar desde la parroquia de San Gil, que, de este modo, recuperará momentáneamente aquellos tiempos en los que daba cobijo a La Macarena o, más recientemente, a Jesús Despojado allá por los albores de la década de los noventa. Aunque, en esta ocasión, todo irá teñido, como exige la Reina del Carmelo, de marrón y blanco, algo que indican desde hace días las colgaduras y banderolas que decoran la feligresía.

Todo a la espera de ese reencuentro que cada verano tienen sus vecinos con una Virgen del Carmen que echó el ancla en sus corazones, la misma que muchos ven desde el azulejo que tiene en la calle San Luis y que siempre estará a la sombra de la Señora de Sevilla. A excepción de hoy, cuando será Ella la que acapare todas las miradas, recorriendo calles que se quedaron este año con las ganas de disfrutar como se merece ese Verde Esperanza y que estarán llenas de gente para no perderse detalle de una procesión no sólo olerá a incienso y cofradías, también en cierto modo a despedida.

No en vano, estamos ante la penúltima de un ciclo que acabará mañana en la Alameda, antes de sumir a la ciudad en un letargo del que sólo despertará vagamente durante el 15 de agosto, cuando se postre a las plantas de la Virgen de los Reyes. Por eso, resulta obligado para muchos acudir a San Gil y disfrutar de lo lindo, puesto que estamos a las puertas de iniciar un descanso obligado que casi nos llevará hasta septiembre. Una razón más para acompañar a la Virgen del Carmen más Macarena, la que se paseará en loor de multitudes y entre sones con aires de Madrugá que llegarán desde Salteras

No hay comentarios:

Publicar un comentario