En Sevilla, el verano ha sido capicúa. De hecho, lo arrancamos hace prácticamente tres meses con el ciclo de procesiones eucarísticas por la ciudad. Y ahora, cuando encaramos la recta final de la estación estival, San Bernardo se encargará de poner el broche de oro a los paseos del Santísimo por la capital hispalense, celebrando así por todo lo alto, y como ya es una tradición en el barrio de los toreros, el día que el calendario nos señala como el de la Exaltación de la Santa Cruz.
Así, hoy podremos disfrutar de una eucarística singular, diferente al resto. Que saldrá bajo la luz de la luna y que, como hace la hermandad cada Miércoles Santo, resucitará por unas horas una zona de la ciudad que hace ya varios años vivió una profunda transformación, pero que mantiene absolutamente intacto el cariño por sus principales señas de identidad. Por ello, no faltará la bulla en las aceras mientras los carráncanos anuncian el paso de un cortejo que se cerrará con la última Custodia que verán las calles de Sevilla hasta el próximo año.
Y es que hoy, cuando también la Virgen de las Mercedes de la Puerta Real se 'mude' momentáneamente de su capilla a la del Museo, la capital hispalense despedirá por completo un ciclo que muchos daban por cerrado hace meses, pero al que le faltaba todavía el más bellos de sus epílogos. Este se vivirá en San Bernardo, sirviendo además para dar un nuevo paso adelante en una espera que poco a poco se va consumiendo casi sin darnos cuenta. Porque el tiempo avanza y ya sólo quedan 198 días para para ver a los primeros nazarenos fuera.
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