A estas alturas del año, prácticamente toda Sevilla ha perdido la esperanza de poder disfrutar por sus calles de una salida extraordinaria. ¿Toda? No, porque en San Vicente todavía queda una corporación cuya moral se mantiene intacta pese a que desde Palacio se le ha invitado a desistir de su firme intencion de sacar el misterio a la calle. Se trata de Las Siete Palabras, hermandad a la que el delegado diocesano, Manuel Soria, recomendó hace unos meses que optara por hacer un Vía Crucis con su Crucificado por las calles de la feligresía (recuérdalo aquí), pero que todavía no se da por vencida.
De hecho, su hermano mayor, Antonio Sánchez Padilla, ha reconocido públicamente que piensa agotar los plazos para que el misterio salga el próximo mes de octubre, cerrando así los actos de los primeros 500 años de vida de la cofradía. En este sentido, el máximo mandatario de la corporación del Miércoles Santo insiste en la idea de que "aún hay tiempo" para organizar la procesión, puesto que se trata de "un paso que puede montarse y desmontarse fácilmente" y que, incluso, todo estaría preparado para que, en caso de que fuese necesario, la Virgen del Rosario retrasase su salida hasta el día 1 de noviembre. No obstante, admite que la cosa "está muy complicada", pero no cierra ni mucho menos la puerta a la esperanza.
De todas formas, lo cierto es que el tiempo corre en su contra y que, pese a los esfuerzos de la junta de gobierno, la posibilidad de ver el misterio de Las Siete Palabras en la calle parece improbable. Máxime cuando desde Palacio se hace hincapié en que el D Aniversario es de la hermandad sacramental de la que surgió y que éste ya se celebró con la extraordinaria del Corpus de la feligresía (lee sobre ello aquí). Pero en San Vicente no tiran la toalla y siguen soñando con disfrutar de su Cristo paseando por el barrio en una tarde-noche de otoño. Sin embargo, desde Virgen de los Reyes no faltan candidatos dispuestos a hacer que despierten pronto.
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