'Overbooking' bajo las trabajaderas

Restan apenas nueve días para que volvamos a ver a La Macarena en la calle con motivo del L Aniversario de su Coronación Canónica. Y pese a que todo parecía estar atado y bien atado tanto para las procesiones del 24 como para la del 31 (recuérdalo aquí), prácticamente no hay jornada que no nos depare alguna novedad sobre la que, previsiblemente, será la mayor extraordinaria que ha vivido Sevilla en los últimos tiempos. Así, ya se conoce que está descartado el tránsito del cortejo por Fray Diego de Cádiz para llegar al Pumarejo y seguir por Relator, ya que las obras para arreglar San Luis desde ese punto lo impedirán. En este sentido, aún se desconoce qué decisión tomará la junta de gobierno, aunque todo apunta a que se tirará por Aniceto Saenz, Pumarejo, San Luis, San Gil, Arco y entrada.

También se ha solventado el asunto de los cinco euros por silla para el pontifical en la Plaza de España (míralo aquí), optando por un sistema de invitaciones en el que tendrán preferencia quienes hayan pagado su papeleta de sitio para acompañar a la Virgen. Además, se ha conocido en los últimos días que la 'Reina de San Gil' será portada por un total de 190 costaleros, es decir, el equivalente a seis cuadrillas completas, formadas por las dos del palio, tres que salen del misterio y una mixta, o lo que es lo mismo, compuesta a medias por gente de los dos pasos de la corporación. Incluso, el hijo de Antonio Santiago, capataz general de la cofradía, estará tanto bajo las trabajaderas como mandando fuera de ellas, dando lugar a una situación, cuanto menos, curiosa.

Sea como fuere, es precisamente este 'overbooking' costaleril el que ha vuelto a disparar las críticas hacia una extraordinaria que muchos siguen defendiendo que se ha ido de madre, resultando absolutamente desproporcionada. De hecho, hay quienes la catalogan de romería sacada de la manga, fuera de toda lógica teniendo en cuenta la difícil situación económica que muchos viven actualmente. Otros, en cambio, dicen que todo lo que se haga es poco, ya que La Macarena se merece todo esto y más. En cualquier caso, lo que sí está claro es que tanto el 24 como el 31 Sevilla entera se echará a la calle para acompañar a la Virgen de la Esperanza, aunque algunos dirán con guasa que habrá casi tanta gente fuera como debajo de las trabajaderas de su palio.