¿Otro paso para el Corpus?

Aún tenemos fresco en la memoria la jornada de ayer del Corpus Christi, pero ya empezamos a pensar en la de 2015. Al menos, así lo hacen en la hermandad de San Hermenegildo, que precisamente ha vivido su estreno como parte del cortejo este año. Aunque esta corporación, con sede canónica en el templo anexo a la Puerta de Córdoba, ha debutado en estas lides no solo con la firme intención de quedarse, sino de, incluso, hacerse fuerte en la procesión. De hecho, contempla la posibilidad de hacerse responsable de un nuevo paso que se incorporará a la misma en el plazo de doce meses, para lo cual tienen clarísima qué imagen se utilizaría y que van a iniciar los trámites pertinentes para ello a la vuelta del verano.

Se trata de la de su propio titular que se venera en la capilla del cardenal Cervantes de la Catedral, hecho que aligeraría sobremanera el proceso. En este sentido, desde San Hermenegildo se entiende que la figura de su Patrón tiene una importancia capital en la iglesia hispalense, puesto que hablamos de alguien que murió martir a manos de su propio padre, el rey Leovigildo, a causa de no renegar de su fe católica (su progenitor era arriano), razón por la cual debería entrar en el cortejo como ya lo han hecho Santa Ángela, Santa Justa y Santa Rufina, San Isidoro, San Leandro o San Fernando. Además, su entrada en escena serviría para paliar, al menos en parte, los problemas de la procesión, que llega a hacerse demasiado tediosa en algunos tramos en los que se echa en falta algún paso.

Sea como fuere, desde el Cabildo Catedralicio aún no se han pronunciado al respecto, si bien esta opción no es ni mucho menos descabellada. En cualquier caso, habrá que esperar acontecimientos y a que pasen los meses para ver en qué queda esta propuesta que bien podría provocar que el Corpus de 2015 fuese diferente. Incluso, habría que ver si una hipotética respuesta positiva propicia que desde La Cena se vuelvan a hacer movimientos para que su Cristo tenga un sitio en la procesión, pese a que siempre se le ha negado por su claro carácter pasionista. Así las cosas, el tiempo se encargará de acabar con la duda de si dentro de un año el cortejo del Santísimo dará o no el estirón.