Con la miel en los labios

Ni con una salida extraordinaria. De nuevo, la hermandad de La Soledad de San Buenaventura se va a quedar con las ganas de ver en la calle sobre un paso al Señor de la Salvación, ya que la propia junta de gobierno ha desechado la posibilidad de sacarlo con motivo del 75 aniversario de su hechura (sobre lo que puedes volver a leer aquí). Finalmente, la idea inicial de la procesión será sustituida por la organización de un encuentro de cofradías cuyo titular cristífero tenga la misma advocación.

Así, se esfuma la posibilidad de hacer realidad uno de los mayores sueños de gran parte de sus hermanos, que llevan años intentando incorporar al Señor que tallase Manuel Cerquera en 1935 al cortejo de la corporación, algo a lo que se han negado en rotundo los franciscanos que regentan el templo en el que reside. De hecho, no parece para nada descartable que esta decisión haya podido estar motivada por las malas relaciones existentes entre la orden y la cofradía, optando ésta última por adoptar esta solución para evitar males mayores.

En cualquier caso, muchos de los que nos habíamos ilusionado con verlo en la calle, ya fuera en solitario sobre el paso de La Soledad o acompañado por Ésta en un 'Stabat Mater', nos hemos vuelto a quedar con la miel en los labios, sobre todo porque es casi seguro que, salvo que se produzcan cambios radicales por el viejo convento de San Buenaventura, ésta era la única posibilidad que tenía para poder procesionar por Sevilla. Sólo queda esperar que el paso del tiempo reduzca las distancias existentes entre franciscanos y hermandad, haciendo que algún Viernes Santo de dentro de no demasiados años, seamos testigos de cómo el sol de la tarde se refleja en la policromía de un Señor de la Salvación cuya figura se pueda intuir a lo lejos entre filas de nazarenos y capirotes.