sábado, 10 de julio de 2010

Julio del Carmen

Marzo estuvo marcado por la Cuaresma. Abril, por la Semana Santa. Mayo, por las Glorias y las Cruces. Junio, por las procesiones eucarísticas. Y julio, sin duda, es el mes de la Virgen del Carmen. Sobre todo en una ciudad como Sevilla, que a pesar de no tener mar, se mira en su río y se siente marinera, por lo que vive con una grandísima intensidad su devoción por esta advocación. Así, y tras el  avance que vivimos en el Pregón de las Glorias con la de San  Gil, en los próximos días saldrán por las calles de la ciudad, incluido el Guadalquivir, varias procesiones en honor a la patrona del carmelo.

La primera de ellas saldrá esta tarde, a partir de las 20.00 horas, de la parroquia de San Leandro, en ésa zona del distrito Macarena que vive más allá del arco y que hoy, casi dos meses antes de llenarse de Esperanza (para leer sobre ello, pulsa aquí) vivirá hoy su día grande. Será el reencuentro de la Virgen que tallase Buiza con la barriada del Carmen, la que lleva su nombre, y  que está a la vera de un hospital donde muchos de sus devotos dejarán escapar una oración de sus labios cuando escuchen por la ventana los sones de las marchas que la acompañan.

Mientras, en el interior del templo, el Señor de la Bondad esperará su regreso, al modo en el que Sevilla lo ha hecho con este mes en el que, entre altas temperaturas y vacaciones, la ciudad se vuelve más marinera que nunca y quiere navegar siguiendo el rumbo que marquen sus capitanas. Porque en la capital hispalense, julio se sucede entre Vírgenes del Carmen, ya sea en el centro o en los barrios, por el río o por las calles. Y es que esta devoción echó el ancla hace siglos en un sitio que fue Puerto de Indias y que cada año, por este mes, tiene como único color especial el marrón de la Reina del carmelo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario