Otro altar para el Salvador

Probablemente, si a muchos nos preguntasen cual es el mejor paso de cuantos procesionan en la Semana Santa de Sevilla, la mayoría coincidiríamos en que se trata del que pasea cada Jueves Santo al Señor de Pasión, una auténtica obra maestra labrada en plata, oro y marfil que salió del taller del inigualable genio Cayetano González y que, pese a que lleva muchísimos años entre nosotros eso no evita que sea capaz de dejarnos con la boca abierta cuando avanza imponente a nuestro lado. Por este motivo, no han sido pocos los que han llegado a denominarlo como un auténtico altar a la altura del Dios de la Madera, algo que en la parroquia del Salvador parecen haberse tomado al pie de la letra.

No en vano, desde hace unos días el trono ha comenzado a ser expuesto de manera permanente en la colegial, situándose justo a la derecha de la capilla sacramental y con la Custodia del templo encima, al modo en el que procesionaba hasta hace unos años durante el Corpus de la feligresía. De igual modo, se prevé que en cuestión de unas dos semanas como muy tarde la seguridad de esta composición quede certificada con un acristalamiento similar al que ya tienen en su museo la hermandad de La Macarena para sus tres pasos (misterio, palio y Virgen del Rosario), a fin de evitar posibles daños y atentados contra ella.

Así las cosas, Sevilla está de suerte, puesto que el segundo templo de la ciudad cuenta con un nuevo altar de verdadera categoría y que, además, nos va a permitir disfrutar todo el año de una obra maestra que, hasta el momento, sólo podíamos ver de Semana Santa en Semana Santa. Cierto es que quizás echemos de menos al verlo al Señor de Pasión presidiéndolo, pero es que todo no se puede tener en esta vida. Aunque eso sí siempre nos quedará un recurso tan manido como efectivo para paliarlo: pensar que cada vez queda menos para un nuevo Jueves Santo.