sábado, 8 de octubre de 2011

Como mandan los cánones

Salvo contadísimas excepciones, un sábado en Sevilla es sinónimo de cofradías por la calles. Por ello, hoy, como manda esa norma no escrita podremos disfrutar de hasta cuatro procesiones en las que, como también suele ser habitual, los barrios serán los grandes protagonistas. No en vano, dos de ellas cuentan con su denominación de origen como apellido. Una es la Virgen del Rosario del Barrio León, que tras celebrar en la parroquia de San Gonzalo los cultos conmemorativos de su onomástica, que tuvo lugar en la jornada de ayer, regresará a casa en loor de multitudes y con toda su gente acompañándola. La otra, la que paseará la misma advocación por las calles de San Jerónimo, demostrando una vez más que el ambiente de cofradías para nada está reñido con el hecho de estar distante del centro.

Pero también será tarde de nazarenos, aunque no porque vayamos a ver túnicas y capirotes, sino Cristos con la cruz a cuestas. Es lo que ocurrirá en la barriada de Los Príncipes, donde el Señor de la Caridad en su Tercera Caída nos evocará, aunque sea vagamente, aires de una Madrugá que el agua se encargó de arrebatarnos. Mientras, en San Pablo será el Nazareno de la agrupaciónn de La Humildad quien se reencuentre con el otoño tras su breve experiencia el año pasado en el Viernes de Dolores, acaparando un mayor protagonismo que entonces y sirviendo como la mejor medicina posible para quienes seguimos esperando.

Y así, entre Glorias e 'Ilegales' transcurrirá una jornada más en esta casi eterna cuenta atrás hacia un nuevo Domingo de Ramos, la que abrirá un segundo fin de semana de octubre que llega con un programa menos completo que el del anterior pero que servirá de respiro necesario para lo que aún está por venir. No obstante, y por fortuna, podremos disfrutar de pasos por las calles, de olor a incienso y al son de marchas procesionales. Será una tarde en la que incluso, según las previsiones, no estará de más tirar de la manga larga, pensando que ya va quedando menos para vivir lo mismo pero mientras las rebecas y los jerseys finitos ya nos vayan estorbando...

No hay comentarios:

Publicar un comentario