La novena de las Vísperas

Hace unos meses nos hicimos eco de la situación de la agrupación parroquial de San José Obrero, cuyo proyecto de Reglas como corporación de penitencia llevaba en Palacio siete años sin haber obtenido la aprobación (recuérdalo aquí). Pues bien, todo hace indicar que la espera está a punto de llegar a su fin y que en breve la corporación se convertirá en la novena que procesionará con nazarenos durante las Vísperas, tras Pino Montano, Padre Pío-Palmete, La Misión, Bellavista, La Corona, Pasión y Muerte, Torreblanca y Alcosa.

Según la rumorología, la confirmación oficial debe llegar como muy tarde a comienzos de 2012, aunque el Consejo ya estaría al tanto de la situación, ya que el Arzobispado se lo habría notificado a fin que ubicase a la nueva cofradía entre el Viernes de Dolores y el Sábado de Pasión. En este sentido, sería más que probable que el estreno de túnicas blancas y antifaces azules en San José Obrero se produjese la tarde antes del Domingo de Ramos, puesto que la primera de las dos jornadas de Vísperas ya se encuentra bastante saturada. De hecho, la últimas penitenciales que llegaron a ellas procedentes de otras, San Pablo y El Sol, lo hicieron así, por lo que es presumible que ahora ocurra lo mismo.

Con todo ello, sólo queda dejar el tiempo correr para ver cómo Asenjo lleva los capirotes a un barrio de Sevilla que jamás los ha visto, pero que desde hace unos años, tras vivir siempre al abrigo de las Glorias, los ha empezado a intuir. No en vano, desde hace tiempo conoce los diálogos entre varales y bambalinas de un palio e, incluso, el año pasado vio cómo la hermandad de San Pablo regresó a su casa el Domingo de Resurrección por sus calles. Las mismas que ya esperan ver a los primeros nazarenos que las pisarán y que, como soñaban sus vecinos desde hace tiempo, serán los que acompañen al Señor de la Caridad (que también debutará en 2012 sobre un paso) y a la Virgen de los Dolores, que cambiará el verano por la primavera. Lo mismo que todo San José Obrero que en breve tendrá por fin su hermandad de penitencia.