Ni 'Paz' ni gloria

Hay cosas que no tienen ni pies ni cabeza. Sobre todo porque es inconcebible que alguien de Sevilla, criada en esta ciudad y consciente de cómo funcionan las cosas aquí haya hecho lo que Paz Vega. Porque aunque la actriz diga que no pretendía que su posado desnuda junto a la Patrona de la localidad hispalense de Gerena, la Virgen de la Encarnación, ofendiese a alguien, sabía de sobra que iba a traer cola, y mucha. De hecho, el Arzobispado no tardó en condenar enérgicamente los hechos, la hermandad a echar balones fuera diciendo que fue "engañada" para que se hiciesen las fotos y el resto del mundo absorto en un debate sobre si las imágenes suponen un atentado a la moral o no.

El caso es que a la casa que patrocina el calendario, la chocolatera alemana Lambertz, le ha salido redonda la jugada, porque la obra se está promocionando muchísimo más de lo que lo haría de cualquier otra forma. Quién sabe si no estaba ya todo planificado de antemano. Pero, además, hay que recordar que llueve sobre mojado, porque no es la primera vez que la desnudez de la Vega y una talla mariana han compartido escena. Basta recordar que en unas últimas de la película 'Carmen', de Vicente Aranda, aparece sin velo siquiera junto a una Dolorosa. Cierto es que se trataba de una talla desconocida y todo grabado en un templo desacralizado como el de San Luis, pero ahí están los hechos.

Ahora, se ha rizado el rizo y ha quedado confirmado que la actriz se pasa por el forro las tradiciones y valores de su tierra. Se ve que el todo vale del Hollywood donde ¿triunfa? lo ha hecho suyo y extrapolado a todo lo que hace. Habría que ver si, como insinuaba Antonio Burgos en su 'Recuadro' del sábado si sería tan valiente de hacer lo mismo en una mezquita. Porque ofender, por mucho que le pese, ofenden las fotografías, y mucho, sobre todo a los devotos de la Virgen de la Encarnación, que han tenido que soportar una imagen tan absurda como inaudita. Qué lejos quedan los ejemplos de gente como Antonio Banderas y el profundo respeto a las cosas de su patria chica... ¿de verdad no podía haber al menos sugerido otra cosa?

Si el referente del calendario era la mujer andaluza y su belleza, ¿qué mejor que vestirla de mantilla? Ah claro, es que vende más una teta al aire que la estética (sólo hay que mirar las pintas que tiene en la otra instantánea que se ha hecho). Hágaselo mirar entonces señorita Vega, porque si esa ha sido la máxima de toda su carrera, igual es que debería reformular su categoría profesional, cambiando donde pone actriz por Ministra de Cultura, por lo que enseña. La pena es que nunca lo hace cuando y en el lugar que debe, sino a deshora y con la polémica de compañera. Y después querrá que la tomen en serio. Predique con el ejemplo e igual se sale con la suya algún día, porque de momento, aquí no lleva ni 'Paz' ni gloria.