martes, 20 de diciembre de 2011

Los dias grandes empiezan en Córdoba

La cuenta atrás sigue su curso y en breve pasaremos a tener que utilizar tan sólo dos dígitos para saber cuántos días nos separan de una nueva Semana Santa, de un nuevo Domingo de Ramos. En este sentido, las Vísperas pondrán todo más fácil, adelantando extraoficialmente su inicio 48 horas, 72 en caso de que acudamos a Córdoba y disfrutemos como se merece el que ha sido uno de los grandísimos descubrimientos que muchos cofrades hemos tenido en este 2011: la hermandad Universitaria de la capital califal.

Pónganse en situación. Jueves de Pasión, noche cerrada en la judería, en los alrededores de la Mezquita. En ese momento, como por arte de magia, viajamos atrás en el tiempo, a cómo serían los días grandes en el siglo XVII o XVIII, cuando un cortejo encabezado por un muñidor y formado por parejas de encapuchados que iluminan el camino a base de faroles. Van precediendo a un Crucificado diferente, nacido en la vieja Híspalis y que Miñarro talló a imagen y semejanza del hombre de la Síndone (ya hablamos sobre ello aquí). Solemne, sencillo; entre cuatro hachones que le dan mayor recogimiento a Quien no parece una talla sino alguien de verdad muriendo en la cruz.

Detrás, sin palio, a cielo abierto, la Virgen de la Presentación. La misma a la que los tunos de las facultades cordobesas colocan sobre su paso ya en la calle. Su imagen evoca una estampa de otro tiempo, parca en cera y flores, más cercana a los Vía Crucis que sirvieron de gérmen para la actual versión de esta fiesta que a las procesiones a uso sin las que hoy seríamos incapaces de imaginar los días grandes. Pero así lo fueron hace siglos, con cofradías difuminándose entre estrecheces y paredes encaladas, como ahora lo hace cada Jueves de Pasión en Córdoba, cuando todavía no ha terminado la espera pero ya sentimos que acaba. Porque hoy queda sólo 100 días para que en la tierra de los califas muchos demos por estrenada una nueva Semana Santa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario