Que el Consejo sigue inmerso en una profunda crisis institucional es algo que sabíamos todos desde hace tiempo. De hecho, el presidente, Carlos Bourrellier, parece incapaz de gobernar la institución con mano izquierda, algo que no pasa desapercibido para algunas hermandades que, ante tal vacío de poder, le han puesto ya entre la espada y la pared en más de una ocasión. Así, el máximo órgano cofradiero se ha acostumbrado a acumular ridículos y perder crédito en la ciudad a marchas forzadas, haciendo que cada vez sean menos los que estén de acuerdo con todo lo que ocurre en la calle San Gregorio.
Pero, incluso desde allí se sigue echando más leña al fuego. Y no cualquiera, sino el propio Bourrellier, quien en una entrevista concedida a 'El Llamador' dejaba claro que veía fantasmas por todas partes. "Tú no sabes si el que está sentado a tu derecha es el Judas que te está traicionando continuamente", afirmó el que fuese hermano mayor de El Buen Fin, quien, de este modo, confirmaba que no existe demasiada confianza entre la cúpula decisional capillita de la capital hispalense, donde las filtraciones a la prensa llevan siendo el pan nuestro de cada día desde hace tiempo.
Sea como fuere, lo que resulta curioso es que, pese a esta situación prácticamente insostenible, el Consejo no busque una solución, ya sea con unas elecciones o una limpia de la institución. En ambos casos, la gran perjudicada sería la junta superior actual, cogida con alfileres y que, de hacer algo, podría encontrarse con una oposición mucho más fuerte y que podría quitarle el sitio de manera inminente. Quizás por eso, y aunque la decoración no pueda ser más incómoda, Bourrellier y los suyos prefieren hacer de su capa un sayo y continuar con su huida hacia adelante, en la que da igual perder crédito, pero donde también pierde sentido decir que se ven fantasmas por todas partes.
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