Cofradías y fútbol

Sin lugar a dudas, pocas cosas pueden estar tan arraigadas en Sevilla como la Semana Santa y los equipos de fútbol de la ciudad: el Betis y el Sevilla. De hecho, ambos son polos opuestos capaces de crear grandes sencaciones y sentimientos en muchos hispalenses, hasta el punto de que, sabedores de ello, han llegado a darse la mano en numerosas ocasiones. Así, los escudos de ambos conjuntos están presentes en la decoración de muchos pasos y hay hermandades que parecen estar vinculadas de manera especial con alguna de las escuadras. Así, por ejemplo, durante años los heliopolitanos, vecinos de La Misión, han estado ligados al Gran Poder, así como los nervionenses a La Sed, San Bernardo y San Benito.

Del mismo modo, ambos clubes tienen desde ayer un vínculo especial con Montesión, puesto que los presidentes de ambas entidades condecoraron con sus respectivas insignias de oro y brillantes a la Virgen del Rosario, con motivo del 450 aniversario de la corporación de la antigua plaza de los Carros. Curiosamente, no coincidieron en un mismo acto, sino que los verdiblancos lo hicieron a partir de las 18.30 horas y los blanquirrojos sesenta minutos después. De esta manera, la Señora de la calle Feria lucirá los colores de ambos equipos bajo su palio cuando, el próximo día 31, salga bajo su palio por las calles de la feligresia en la procesión extraordinaria que cerrará los actos conmemorativos de la efeméride del nacimiento de la hermandad.

Como es habitual, las reacciones no se han hecho esperar. Algunos hablan de agravios comparativos, puesto que ambos equipos no han actuado de la misma manera en otras ocasiones. Otros, más radicales, de que se está queriendo acaparar protagonismo a costa de las cofradías, mezclando las churras con las merinas. Pero también los hay que alaban este detalle y lo ven como el respaldo de la sociedad sevillana a la corporación, y que no se rasgan las vestiduras por lo sucedido. Y es que en la capital hispalense, como es normal, no siempre llueve a gusto de todos y la polémica está servida en cuanto algo un tanto anómalo ocurre dentro del mundo de la Semana Santa. De hecho, pensándolo bien, quizás no sean tan diferentes entre sí las hermandades y el fútbol...