Como se sabía ya desde hace unos meses, Asenjo ya tiene una mano derecha para ayudarle en su labor pastoral en Sevilla (leelo aquí). Así, el pasado sábado, al mediodía, se dio a conocer que Santiago Gómez Sierra tendrá el cargo de obispo auxiliar en la archidiocesis, a la que se incorporará el próximo día 26 de febrero, tras un acto que se celebrará en la Catedral. A partir de entonces, se convertirá en el lugarteniente de un arzobispo junto al que ya ha trabajado durante años en Córdoba.
No en vano, a pesar de ser natural de Madridejos (Toledo), donde nació hace 53 años, fue ordenado sacerdote en la capital califal en 1982, donde ha desarrollado casi toda su carrera eclesiástica. De hecho, allí ocupó los cargos de vicerrector del Seminario Mayor San Pelagio, prefecto de estudios y profesor del Instituto Superior de Ciencias Religiosas Beata Victoria Díez, delegado de pastoral vocacional, párroco de San Juan y Todos los Santos (La Trinidad), vicepresidente de la junta de gobierno de la Obra Pía Santísima Trinidad, vicario general, presidente del consejo de administración de CajaSur, confesor de varias comunidades religiosas y director espiritual de la Adoración Nocturna Femenina Española en la Diócesis cordobesa. Es decir, que tiene un currículum de lo más dilatado en la ciudad de la Mezquita.
Ahora, tal y como hizo Asenjo hace poco más de un año, da el salto a Sevilla, donde intentará dar cobertura a su mentor en las parcelas que este no pueda cubrir. De este modo, se recupera una figura que hace años que no existía en la ciudad, sobre todo porque el último pastor, monseñor Amigo, jamás la necesitó. Sin embargo, las cosas han cambiado, y muchísimo, como muestra este nombramiento con el que el arzobispo quiere reforzar su papel en una ciudad que, ya sea por datos objetivos o subjetivos, a todas luces, le sigue quedando demasiado grande. Veremos a ver a partir de ahora...
.gif)
No hay comentarios:
Publicar un comentario