Dentro de un mes, Triana se vestirá de Domingo de Ramos para disfrutar de la salida extraordinaria de la Virgen de la Estrella con motivo de su 450 aniversario. Será una ocasión especial, en la que la Reina de San Jacinto no cruzará el puente, sino que se paseará por las calles de su barrio, visitando a hermandades vecinas como La Esperanza de Triana o La O. Pero, además, su palio recuperará un elemento que dejó de usar hace 15 años, las velas rizadas.
De hecho, desde que en 1995 estrenase el paso diseñado por Garduño y bordado en los talleres de Fernández y Enríquez, la única cera que ha acompañado a la Virgen ha sido la de su candelería y los candelabros de cola, ya que la junta de gobierno de aquel momento decidió obviar las velas rizadas con la intención de que así se la pudiese ver mejor. La medida continuó contando con el beneplácito de las sucesivos hermanos mayores, haciendo que muchos jóvenes no hayan podido disfrutar de una imagen que, para muchos, destila "puro sabor a barrio".
Quizás por ello, o por el carácter extrordinario de la salida, la corporación del Domingo de Ramos ha decidido recuperarla. Curiosamente lo hará en el mismo palio en el que lo hizo la última vez (hay que recordar que la hermandad tiene dos), flanqueando a La Estrella a cada lado y precediendo a la fila más pequeña de las velas de la candelería. Será un reclamo más para una procesión con la que, a buen seguro, se volcará la Sevilla cofrade, ésa que volverá a reencontrarse con una imagen que el tiempo aún no ha borrado del todo de la memoria, pero que algunos verán por primera vez.
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