sábado, 12 de marzo de 2011

Si Él quiere...

Llegamos a la primera de esas fechas que tenemos marcadas en rojo en la presente Cuaresma. No en vano, hoy, siempre que el tiempo lo permita, tenemos una cita con la historia, con el sueño hecho realidad de una hermandad que lleva muchos años luchando para sacar a la calle sobre un paso a uno de sus titulares y que ahora por fin se ha conseguido. Se trata del Señor de la Salvación de la cofradía de La Soledad de San Buenaventura, que si la lluvia no lo impide, saldrá por las calles de la feligresía para celebrar sus primeros 75 años de vida (lee sobre ello aquí).

Lo hará con la sobriedad propia de un Viernes Santo, entre cuatro hachones, lirios, y sobre un canasto de caoba llegado desde San Juan de Aznalfarache, aunque sin llegar, como era el plan inicial, a la Catedral, ya que Palacio se negó a ello (recuérdalo aquí). Pero no le hará falta, porque la propia ciudad hará las veces de la Seo para acompañarle como se merece, en el que bien podría ser el mejor ensayo posible para su incorporación al cortejo de la corporación en un futuro que se ve más cercano que nunca, ya que este puede ser el primer paso para ello.

Pero, al margen de este momento que muchos llevábamos esperando años, la tarde nos regalará otro Via Crucis extraordinario desde la calle Torneo, el que protagonizará el Señor de la Paz de Los Humeros con motivo del CCL Aniversario de la corporación, regalándonos estampas inéditas por estas fechas. Y, para que no nos falte de nada, también tendremos en la calle al Cristo de la Salud de Montesión, al de la Salud de La Carretería, Divino Perdón de Alcosa, los titulares de La Estrella y la Piedad de El Baratillo, aunque, eso sí, siempre y cuando Él decida que es el momento para hacerlo, alejando unas nubes que llevan descargando sobre nuestras cabezas varios días y amenazando con más agua cada vez que escampaba. Por ello, tendremos que esperar a ver su elección, porque esto, como todo, está en sus manos. Él será quien decida si lo vemos por las calles o tenemos que seguir esperando.

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